Murieron calcinados pero su beba se salvó de milagro
Por Redacción
Un tremendo accidente ocurrió en la localidad rionegrina de General Conesa el pasado domingo por la mañana.
Tres personas fallecieron en el siniestro y una beba se salvó de milagro, gracias a la rápida acción de su madre que la arrojó desde el auto instantes previos a que se prendiera fuego.
Según fuentes locales una familia que viajaba en un Chevrolet Aveo chocó contra una camioneta Toyota 4×4 en la ruta nacional 251. Y antes de que el auto ardiera en llamas, la mujer arrojó a la beba de 14 meses para salvarle la vida.
Las personas que iban a bordo del Aveo acompañaban a un piloto que disputaba la 4° fecha del campeonato de Safari Regional, a campo traviesa.
La principal hipótesis de los peritos es que el Chevrolet, habría doblado sobre la cinta asfáltica para retomar el camino hacia Conesa y así chocó contra la Toyota.
El auto estaba al mando de Gerardo Chicaval, de 42 años, quien estaba acompañado por Antonella Alfaro, de 25 (mamá de la infante) así como por Miguel Botana, de 27.
Las tres personas que iban a bordo del Aveo murieron calcinados. La beba, gracias a un reflejo de su madre se salvó de una muerte segura.
Por otro lado el conductor de la camioneta, oriundo de la provincia de Chubut, está fuera de peligro y fue asistido en un hospital local.
El jefe del Destacamento de Seguridad Vial de la localidad de San Antonio Oeste, Gustavo Andrade explicó que un testigo que presenció el accidente fue quien tomó a la pequeña entre sus brazos hasta que pudo llegar el servicio médico.
Afortunadamente la vida de la bebé no corre peligro y sólo sufrió algunos rasguños.
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