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Lunes de calor extremo con cuatro provincias en alerta roja

El Servicio Meteorológico renovó las advertencias para varias zonas de la Argentina. Corrientes, la más comprometida

Por Redacción

12 de febrero, 2024 - 08:38

La ola de calor que se extendía sobre casi todo el país parece haber bajado en intensidad, dejando lugar a las tormentas fuertes. Sin embargo, hay una zona que todavía debe hacerle frente a las temperaturas extremas: hablamos de algunas provincias de la mesopotamia, en la zona limítrofe con Paraguay.

El Servicio Meteorológico Nacional renovó para este lunes feriado las advertencias por altos registros en el termómetro para algunos distritos. 

El aviso de alerta roja se mantiene para casi toda la provincia de Corrientes, pero también Misiones, este del Chaco y este de Formosa. En algunas zonas de Misiones la alerta bajaba a naranja, y una pequeña porción tenía también alerta amarilla.

Qué significa cada alerta

Alerta amarilla

Aquí se establece un efecto de leve a moderado en la salud, según indica el sistema del SMN. En este caso, las temperaturas pueden ser peligrosas, sobre todo para los grupos de riesgo como niños, adultos mayores y aquellas personas con enfermedades crónicas.

Alerta naranja

Este aviso implica un efecto de moderado a alto en la salud, por lo que las temperaturas pueden ser muy peligrosas, sobre todo para los grupos de riesgo

Alerta roja

El nivel rojo significa que el calor puede tener un efecto de alto a extremo en la salud. Aquí las temperaturas suben a 'muy peligrosas', y pueden afectar a todas las personas, inclusive a las más saludables.

Qué hacer ante un evento de temperatura extrema

-Aumentar el consumo de agua sin esperar a tener sed para mantener una hidratación adecuada.
-No exponerse al sol en exceso, ni en horas centrales del día (entre las 10 y las 16 horas).
-Prestar atención a los bebés, niños y niñas y a las personas mayores.
-Evitar las bebidas con cafeína, con alcohol o muy azucaradas.
-Evitar comidas muy abundantes.


-Ingerir verduras y frutas.
-Reducir la actividad física.
-Usar ropa ligera, holgada y de colores claros; sombrero, anteojos oscuros.
-Permanecer en espacios ventilados o acondicionados.
-Recordar que no existe un tratamiento farmacológico contra el golpe de calor y sólo los métodos clásicos, citados arriba, pueden prevenirlo y contrarrestarlo.