Macron arriba a Brasil con una intensa agenda
París considera clave la relación con el gigante sudamericano. Comenzará su gira por Belém, siguiendo por Rio de Janeiro, Sao Paulo y Brasilia
Por Redacción
En su primera visita, desde este próximo martes hasta el 28 de marzo, a Brasil, el presidente francés, Emmanuel Macron, buscará con su par brasileño, Lula da Silva, reverdecer la relación bilateral a través de la Amazonia y la fabricación de submarinos, pese a sus diferencias sobre Ucrania o el acuerdo UE-Mercosur.
Luiz Inácio Lula da Silva, de 78 años, recibirá a su par de 46 años este martes por la tarde en Belém, donde el líder francés iniciará una visita de tres días que lo llevará también a Rio de Janeiro, Sao Paulo, y Brasilia.
“Estamos viviendo un momento brasileño”, aseguró la presidencia francesa, que consideró “una señal de gran importancia” que Macron establezca tres jornadas de actividades en su primera visita bilateral a este país de América Latina.
La potencia latinoamericana preside actualmente el grupo del G20 de grandes economías globales y, en 2025, acogerá en Belém la conferencia de las Partes sobre Cambio Climático (COP30). Además, actualmente, es un miembro clave del grupo de países emergentes BRICS+.
Francia, considerada la séptima economía mundial, y Brasil, que ascendió al noveno lugar, se posicionan como actores importantes en una escena internacional marcada por la pulseada entre China y Estados Unidos, el cambio climático, y los conflictos de Ucrania y Gaza, por lo que se adelantó que abordarán los “retos globales”.
Según la mirada de analistas, París ve en Brasilia un puente de acceso a las potencias emergentes.
La última visita de un mandatario francés a Brasil fue en 2013, de la mano del socialista François Hollande. Por su parte, Lula viajó en junio de 2023 a París tras volver al Palacio de Planalto.
A su vez, la industria y cooperación militar puede volver a catapultar la relación bilateral. Ambos países habían acordado, en 2008, construir cuatro submarinos de propulsión convencional, basados en el diseño de los navíos franceses tipo Scorpene, en la base naval brasileña de Itaguaí, donde se prevé la pronta inauguración y botado de la tercera unidad bautizada “Tonelero”.
El acuerdo, en colaboración con empresa gala Naval Group, también preveía la construcción de un quinto submarino de propulsión nuclear para Brasil, pero sin transferencia de ingeniería francesa respecto a la tecnología del reactor.
Haciendo alusión a sus coincidencias en la lucha contra el cambio climático y contra la pobreza, Macron, que arribará desde el vecino territorio de la Guayana Francesa, comenzará su visita de Estado junto a Lula en una región de la Amazonia.
Francia es el tercer mayor inversionista en Brasil, detrás de Estados Unidos y España, por lo tanto, Macron estará acompañado de una nutrida delegación de empresarios, entre ellos, dirigentes de los grupos Carrefour, Airbus y Naval Group.
Por lo que pudo saberse, el postergado acuerdo comercial UE-Mercosur, al que Francia se presenta como principal opositor, “no está aún en la agenda”, según Brasil.
Sin embargo, París si espera abordar la guerra en Ucrania, un tema espinoso, donde Lula rechaza abiertamente la política de aislamiento a Rusia, y, en la que, Macron pasó de abogar por un diálogo con Moscú a no descartar el envío de tropas de la OTAN para apoyar a Ucrania.
“Pese a las diferencias, es muy importante poder discutir”. “Veremos qué elementos de convergencia pueden conducir a actuar en apoyo a Ucrania, que sigue siendo nuestra prioridad absoluta”, aseguró un comunicado de la presidencia francesa.