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Desafíos y contradicciones en la mediación familiar en Mendoza

En un sistema legal en constante cambio, encontrar el equilibrio es un reto constante para los profesionales y las partes involucradas

Por Redacción

11 de marzo, 2024 - 18:10

En una reciente entrevista con El Interactivo (lunes a viernes, de 12 a 14, por Facebook y YouTube de Ciudadano.News), la abogada especializada en Derecho de Familia Carolina Jacky, compartió sus reflexiones sobre la mediación en el Fuero de Familias en Mendoza. Sus palabras, cargadas de experiencia y análisis, arrojan luz sobre un tema crucial en la resolución de conflictos familiares. 

Según Jacky, las mediaciones en el Fuero de Familias enfrentan un desafío significativo: el 70% de las audiencias en mediación fracasan. ¿Por qué ocurre esto? La abogada nos lleva a un viaje al pasado, recordando los inicios de los Tribunales de Familias en la calle Mitre y Montevideo. En aquel entonces, la mediación se presentaba como una herramienta prometedora para resolver problemas en diversos ámbitos legales: comercial, civil y, por supuesto, familiar. 

Los mediadores se formaban, se impartían charlas y la mediación se convertía en un pilar dentro del sistema legal. Sin embargo, Carolina Jacky plantea una paradoja interesante: si bien la mediación funciona y crea empleo, también quita trabajo. ¿Cómo es esto posible? La respuesta radica en el tiempo que los jueces deben dedicar a las audiencias de mediación en lugar de enfocarse en otros asuntos judiciales. 

El derecho es una ciencia en constante evolución, y con el tiempo surgieron nuevas normas, tratados internacionales y convenciones. Estos instrumentos legales protegen a los más vulnerables: los niños y las mujeres. Sin embargo, en Mendoza, se crearon códigos de procedimiento locales de familias, y la mediación se convirtió en un amor inquebrantable para el Fuero de Familia. 

Aquí es donde aparece una contradicción importante. Las convenciones y tratados establecen que no puede haber mediación en casos de violencia. Por ejemplo, la falta de pago de una cuota alimentaria se considera violencia económica. Entonces, ¿por qué seguimos viendo mediaciones en temas de alimentos? Los jueces locales reconocen los fracasos en estas mediaciones, las demoras y las dificultades para fijar una cuota alimentaria. 

En resumen, la mediación es una herramienta valiosa, pero su aplicación debe ser cuidadosa y adaptada a las circunstancias específicas. En un sistema legal en constante cambio, encontrar el equilibrio entre la mediación y la Justicia es un desafío constante para los profesionales y las partes involucradas.

Además, Jacky señala que las leyes existen y deben cumplirse. La Ley Nacional 26.485 en la Argentina establece medidas excepcionales en casos de violencia económica, permitiendo al juez convocar a audiencias separadas para ambas partes.

El contacto personal es fundamental para tomar decisiones informadas, y la doctora Day, a cargo del Fuero de Familia en la Corte provincial, debería instar a los jueces a cumplir con estas disposiciones. De esta manera, se agilizaría el proceso y se lograría una resolución más rápida y práctica. /Producción periodística: Daniel Gallardo