Asignación familiar y aumento de sueldo, en la disputa paritaria de los estatales

Se avecina una parada muy fuerte para el gobierno provincial cuando tenga que convocar la paritaria donde se revisa el salario y el escalafón de los trabajadores del Estado mendocino. 

Esto es así, porque más allá de lo que se acuerde con el Sindicato Unido Trabajadores de la Educación (SUTE) y que marque el porcentaje para el resto de los empleados estatales, se prevé dura negociación por la equiparación de las asignaciones familiares con lo que percibe un estatal nacional. 

Una cuestión que, para los observadores de la actividad gremial estatal de la provincia, viene con apoyo político y legislativo de la oposición para que se achiquen esas “abismales” diferencias entre lo que ganan un trabajador nacional, un provincial y un municipal.

Sondeos públicos como el INDEC, o privados como el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) o el Centro de Investigación Social de Mendoza (CISME), entre otros, coinciden en que el sueldo público de Mendoza es uno de los más bajos del país. Tornan aún más grave la situación las asignaciones familiares, porque “mientras por nacimiento la Nación paga $5.904, el empleado estatal mendocino percibe $492. En el caso de los trabajadores con hijos con discapacidad, el nacional percibe $16.496, el mendocino $2.583”, destacan los sondeos.

Tal cual lo expresado, como sucede anualmente el SUTE comenzará la paritaria, pero en este caso será con nueva conducción. Es la que encabezará Carina Sedano (2022–2026), de la lista Azul-Naranja que tuvo el amplio respaldo de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) Mendoza. 

Este organismo gremial fue clave en la obtención del triunfo en uno de los gremios más fuertes de la provincia y es el que por ley propuso en el Senado provincial que “se parte de un trabajador local que no alcance dos salarios mínimos, o trabajadoras jefas de hogar o con hijos con discapacidad. Mientras para el resto de las asignaciones la iniciativa legislativa habla de subas paulatinas, para que, una vez aprobada la ley, en el primer año el incremento sea del 100%, en el segundo el 75%, el tercero de 50% y en el cuarto el 25%, hasta llegar a la ansiada e histórica equiparación con la Nación”.

Los gremios estatales reconocen una suerte de aumento en las asignaciones familiares anunciado y aplicado por el Gobierno provincial recientemente. Pero señalan dos aspectos: no saber a ciencia cierta qué porcentaje se aplicó y si este es el primer paso para un aumento escalonado de este ítem en el salario de los empleados estatales.

La discusión comenzaría apenas se abra la paritaria  

Al respecto, El Ciudadano entrevistó al secretario general de la CTA Mendoza, Gustavo Correa, quien dijo que “es un aspecto importante de agenda de la paritaria que debe convocar el Gobierno provincial. Una cuestión que debe resolverse en la provincia con absoluta prioridad”.

Al preguntarle sobre la situación, aseguró que “es un tema puntualmente delicado, con asignaciones que tienen más de $3.500 de diferencia en términos nominales de un hijo de un trabajador público provincial con un hijo de un trabajador público nacional. Incluso después del aumento que dio el Gobernador, porque habiendo duplicado las asignaciones de los empleados estatales estamos a más de esa cifra que le acabo de dar”.

“Para nosotros, la asignación tiene carácter alimentario y tiene un esquema de distribución en los sectores que recién comienzan, en los sectores que tienen hijos pequeños, en aquellos trabajadores y trabajadoras que tienen hijos en edad escolar. Por lo que consideramos que esto debe ser una tarea del Gobierno provincial”, destacó el dirigente. 

Cuando se le observó que la Administración provincial podría aducir problemas de caja para aplicar esas equiparaciones y que no se puede dar más allá de lo que ya se otorgó, Correa contestó molesto: “Mire, el Gobierno se ufana de contar con un superávit de $10.000 millones de un presupuesto al otro. Algo que festejan, porque realmente celebran haberse ahorrado $10.000 millones teniendo una situación como esta y con los peores salarios del país”.

“Lo que tienen que hacer es, en vez de ahorrar en el presupuesto y decirlo, deberían atender la demanda de los sectores a los que tienen que atender, y una demanda es la asignación familiar. Entonces, que dejen de celebrar que ahorraron millones de pesos y que atiendan lo que les pasa a los trabajadores del sector público”, remarcó.

Finalmente, el dirigente sindical estatal consideró: “No puede el Gobierno de la provincia celebrar el ahorro de plata teniendo los peores salarios del país. Porque la atención del sector público es la educación pública, salud pública, la justicia, seguridad pública y la seguridad social”.