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Tratativas contrarreloj para tratar la Ley Ómnibus este sábado en Diputados

Tanto el bloque de La Libertad Avanza como los opositores "amigables" están a la espera de que el Gobierno acepte las sugerencias de cambio de algunos artículos del mega proyecto

Por Redacción

18 de enero, 2024 - 09:55

El presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Martín Menem, ha dejado en claro que quiere apurar el debate en el Congreso de la Nación con el objetivo de que finalmente la Ley Ómnibus enviada por el presidente Javier Milei, sea aprobada este sábado en la Cámara Baja.

Conocedor de los obstáculos que el proyecto debe enfrentar en el recinto, el riojano ha manifestado que en el oficialismo están dispuestos a aceptar modificaciones y en ese trance, esperan que el Gobierno acepte las “sugerencias” manifestadas por la oposición, aún de parte del sector cercano.  

Para apurar decisiones, Menem advirtió que “Argentina no tiene plata ni tiempo” para seguir demorando la aprobación de la ley, atada al polémico DNU del mandatario argentino, del que son objetados varios puntos y algunos de ellos elevados a la Justicia para que dictamine sobre su constitucionalidad.

En tanto, los bloques de la UCR, Innovación Federal y Hacemos Coalición Federal, esperan ver qué modificaciones hará el Gobierno en su proyecto en base a sus condicionamientos para entonces sí estampar la firma al dictamen de mayoría, por ahora frenado. Para ello trabajan en un intento de sumar a un sector del PRO.

Los diputados de la oposición 'dialoguista' estuvieron gran parte del día de ayer en estado de alerta, aguardando una respuesta del Gobierno que al final no llegó.

La encrucijada podría ser resuelta este mismo jueves una vez que se conozcan los cambios que los funcionarios de LLA están haciendo en algunos de los temas cuestionados. Si el Gobierno sigue en su tesitura de que el proyecto se discuta tal como está en estos momentos, con algunas concesiones que ya aceptó, estos bloques tienen decidido presentar un dictamen alternativo que amenaza con bloquear en el recinto el camino del proyecto elaborado por Federico Sturzenegger.

Hasta ahora, se mantienen firmes en su estrategia “semáforo”, dando luz verde a una serie de reformas, mientras declaran negociables otras que les generan dudas y tachan definitivamente medidas que consideran imposibles de apoyar.

Entre estas últimas están los "superpoderes" al Presidente por dos años con la posibilidad de prórroga por dos más, la suspensión de la fórmula de movilidad jubilatoria sin un mecanismo de indexación alternativo, la suba de retenciones a la soja y otros productos de exportación, la reforma electoral basada en el modelo de uninominalidad de exportación y las privatizaciones en paquete.

Como se ve, son puntos que difícilmente logren la luz verde de los bloques opositores, aún de los “amigables”, sobre todo el de los “superpoderes”, que podría ser aceptado si el lapso de su aplicación se reduce a un año prorrogable por uno más.

En tanto, pueden pasar sin objeciones la declaración de la educación y otros servicios como actividades esenciales, las reformas administrativas de simplificación del Estado, las sanciones penales y las restricciones al derecho de huelga y la protesta en la calle, la moratoria (aunque piden premios a los contribuyentes cumplidores) y el blanqueo de capitales, la evaluación continua a docentes y el examen final integrador al concluir la escuela secundaria, la desregulación del mercado de biocombustibles e hidrocarburos y la unificación de los entes reguladores de gas y electricidad.

“La oposición hizo una serie de sugerencias, el Gobierno tomó nota y ahora se está redactando de nuevo el proyecto, viendo qué cambios se incorporan a pedido de la oposición y cuáles no", aclararon a NA fuentes cercanas a la presidencia de la Cámara Baja. Según las mismas fuentes, Menem recibió este miércoles en su despacho a Santiago Caputo, un colaborador del círculo chico del Presidente, con quien discutió la posibilidad de introducir cambios a pedido de los bloques opositores.

Demora en la respuesta tensa la relación con oposición 'dialoguista'

La pelota está ahora en campo oficialista. Si acepta las “sugerencias” y hace los cambios necesarios para que el dictamen tome rumbo al recinto, podrá contar con el apoyo que necesita para que sea aprobado y así obtener un triunfo. Parcial, pero triunfo al fin. Si, por el contrario, se resiste, su proyecto tendrá un destino muy distinto al deseado.