CFK: 194 viajes a Santa Cruz en 4 años con dinero público

El uso de aviones públicos por parte de Cristina Kirchner ha sido motivo de polémica desde hace años, con denuncias, inicio de investigaciones judiciales y controversias que, de todos modos no aminoraron sus viajes pagados por el pueblo argentino por motivos estrictamente privados.

Pero si durante los 12 años consecutivos de gobierno de su esposo y luego ella fueron discutidos, en este último gobierno la historia se repitió al infinito: una investigación del diario La Nación retrata la magnitud de este uso discrecional de la flota presidencial: durante estos cuatro años "hizo 194 vuelos a Santa Cruz, sin ninguna actividad oficial que los justificara.

Se trató de vuelos realizados por lo general de jueves a domingos para descansar en sus casas de Río Gallegos o de El Calafate, a 3000 kilómetros de la Casa Rosada y del Congreso. Para ello, la vicepresidenta no solo voló en distintas aeronaves de la flota presidencial, sino también en aviones de la empresa YPF y hasta de taxis aéreos alquilados en dólares y pagados por la Secretaría General de la Presidenta. Incluso durante la pandemia", sostiene el informe.

Además, el relevamiento hecho con especialistas del mundo aeronáutico señala las cifras gastadas en un estimativo de 5.250.000 dólares.

El tema no parece relevante para la Justicia, ya que la denuncia de la diputada Mónica Frade (Coalición Cìvica) del año pasado contra Cristina Kirchner, Alberto Fernández y el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello, por la posible comisión de los delitos de defraudación en perjuicio de la administración pública, malversación de fondos, y peculado a raíz de los vuelos de la vicepresidenta., fue archivada por el fiscal Gerardo Pollicita, sin haberse investigado, aceptado o solicitado ninguna medida de prueba.

La investigación nombrada accedió a planes de vuelo, a la información de un grupo de especialistas que monitorea y registra, entre otros, los vuelos en aviones sanitarios realizados por gobernadores de las provincias, y los de las aeronaves de la flota oficial en todo el país, "con lo que se logró corroborar en forma fehaciente que la vicepresidenta tomó no menos de 194 vuelos, en su mayoría para ir a Río Gallegos y El Calafate, entre 2019 y 2023".

"Desde que asumió el 10 de diciembre de 2019 y hasta que finalizó esta investigación el 6 de diciembre de 2023 (a solo 4 días de dejar el cargo) la vicepresidenta realizó en total 129 viajes en aviones gestionados por la Presidencia. En 91 de esos 129 vuelos realizados por Cristina con los “Tangos” T-04, T-10 y T-11 las aeronaves volaban “ferry” -esto es, vacías- tanto por haber tenido que ir a buscarla al Sur, o por haberla dejado allá y luego haber vuelto a Buenos Aires, lo que aumenta significativamente los costos operativos", consignan.

Además de los 129 vuelos utilizando la flota presidencial, usó 59 veces dos aeronaves de YPF, un Learjet y un Embraer. "Los vuelos de la vicepresidenta en naves de YPF generaron un gasto de por lo menos 843.675 dólares sólo en costos operativos, por una actividad que no guarda ninguna relación con la desarrollada por la petrolera (que cotiza en la Bolsa y debe rendir cuentas a los accionistas)".

Además de los vuelos, hay que consignar la provisión de caterings de lujo para ella y sus acompañantes, en algunos casos muy llamativos para vuelos de algo más de un par de horas.