Cristina, cada vez más cercada por Bonadio

Finalmente, casi sobre el fin de semana el juez Claudio Bonadio se expresó afirmando que los expresidentes Néstor Kirchner y Cristina Fernández y el exministro de Planificación Julio De Vido, fueron los beneficiarios finales de fondos recaudados indebidamente durante un lapso de ocho años -de 2008 a 20015- por funcionarios de menor jerarquía.

Así aparecen directamente involucrados José María Olazagasti (secretario de De Vido), Hugo Larraburu (colaborador del exjefe de Gabinete Juan Abal Medina), Héctor Daniel Muñoz (secretario de Néstor) y el propio Abal Medina, de quienes se cree derivaban los fondos a Néstor, Cristina y De Vido.

Aunque no le guste al asesor y gurú todo terreno Jaime Durán Barba, quien –según dicen– asegura “que  es mejor para Cambiemos que CFK no sea detenida”, todos los caminos se acercan a una futura detención de la expresidenta, según Bonadio como jefa, junto a Néstor y de Vido, de una organización delictiva conformada por funcionarios públicos, que valiéndose de medios oficiales (incluyendo vehículos, empleados, equipos de telefonía, celulares, etcétera), procuraron la recepción de sumas de dinero ilegítimas por parte de diversos particulares, muchos de ellos empresarios contratistas de la obra pública nacional.

La ruta del dinero K

Saber dónde se encuentra el dinero mal habido es la obsesión de Bonadio y de las distintas oficinas de Lavado y Anticorrupción.

Hasta ahora, y producto de 70 allanamientos, se han decomisado 6 millones de pesos, más de un millón de dólares, 235 mil euros y 250 obras de arte valuadas en 37 millones de pesos, además de una gran cantidad de motos y vehículos, la gran mayoría de ellos de alta gama. 

Después de arduas investigaciones, más lo aportado por los arrepentidos, ahora todos los caminos conducen a Uruguay como destino del dinero mal habido, ya sea en inmuebles o en depósitos de dinero en cuentas off shore. 

Hay miles de millones en danza y el camino ineludible, según los investigadores, es el vecino país, escala obligada en la operatoria que incluyó la fuga de divisas al exterior y el consecuente lavado de dinero. 

En ese sentido ya hay 20 sociedades sospechadas de ser parte de la corrupción K. Una de ellas es Decavial Argentina, de la cual el primer arrepentido, el empresario Carlos Wagner, es accionista. Esa sociedad es  investigada por la  compra de terrenos en Playa Brava por un monto cercano a los 17 millones de dólares, cuya compra Decavial acordó con la firma Jaguar Capital, de Mossack Fonseca. 

Otra pista para dar con más dinero es la de Ernesto Clarens, principal asesor financiero del matrimonio Kirchner, de quien esperan más colaboración y de esa forma dar con el destino final del dinero mal habido. Además deberá dar explicaciones de los 91 viajes en barco que realizó a Uruguay cuando a la vez es propietario de una flota de taxis aéreos.

López sigue deschavando

El exsecretario del Ministerio de Planificación José López ahora respira más tranquilo toda vez que se le homologó el estatus de imputado colaborador de la Justicia. 

En una nueva ampliación indagatoria, el hombre de los bolsos del convento aseguró a la Justicia que le entregaba parte del dinero recaudado al diputado Eduardo Wado de Pedro, integrante de La Cámpora junto a Máximo Kirchner y Andrés Cuervo  Larroque.

El dinero entregado a de Pedro tenía como finalidad –seguran– financiar a Justicia Legítima, integrada por jueces, fiscales y abogados afines al kirchnerismo.

Aunque todavía no se saben los nombres, López también habría involucrado a gobernadores e intendentes beneficiados con obras, quienes están más que preocupados, más aún con las elecciones del 2019 a la vuelta de la esquina que podrían definir su futuro político. 

También hay varios exfuncionarios que todavía no han sido nombrados que ruegan que los arrepentidos pongan coto a sus declaraciones y no sigan acusando para abajo.

Aprovechar la oportunidad

Enhorabuena que la Justicia se sienta libre de presiones y empiece a actuar contra la corrupción, para que el común de la gente no se siente tonta por trabajar honestamente todos los días de su vida, mientras unos cuantos vivos, entre funcionarios y empresarios, se hacen millonarios de la noche a la mañana quedándose con el dinero de todos los argentinos, es bueno ver a la justicia, haciendo lo que tiene que hacer. 

Más allá de algunos fanáticos que descreen de los cuadernos, o de la senadora nacional chaqueña María Inés Pilatto Vergara, que les decía a los senadores de Cambiemos “Nosotros somos chorros pero ustedes también”, como si eso los eximiera de culpa. O de otros, como Larroque, que hablan de conspiraciones, de la CIA, de persecución política, de una nube de humo para tapar la crisis económica que atraviesa el país. 

Es cierto que la crisis está, el gobierno de Cambiemos no puede frenar la inflación y la suba del dólar es preocupante, pero se está descubriendo que es verdad la gran cantidad de pruebas que sacaron a la luz lo que todos decían por lo bajo: que había una matriz para delinquir en la Argentina, y según el propio juez los jefes eran el matrimonio Kirchner y De Vido.

Ojalá que esta sea una bisagra en la historia y nunca más volvamos a sufrir una corrupción de esta naturaleza, culpable también del grave momento económico que vive el país.