Alcohol al volante: el peligro entre los mendocinos

En el inicio de esta semana, un conductor borracho atropelló y mató a una niña de cuatro años y una mujer de 21, en la calle Tirasso y el Acceso Este, en Guaymallén.

El caso volvió a conmocionar a los mendocinos luego de aquel fatídico accidente, a fines de 2018 en la zona de la Costanera, a causa del cual murieron dos niños.

“El alcohol al volante mata”, rezaba una tradicional campaña televisiva de nuestro país. Pero en Mendoza, pese a los innumerables esfuerzos gubernamentales y privados, las cifras de decesos a manos de automovilistas, camioneros o motociclistas ebrios creció y vuelve a poner en foco un flagelo difícil de erradicar.

Al ser tan reiterativos, siempre surge la misma pregunta: ¿por qué manejan si están borrachos? La respuesta parece no tenerla nadie hasta este momento. La imprudencia a la hora de manejar y las fugas de los ‘asesinos al volante’ son dos factores que, mezclados, son letales para cualquier sociedad del mundo.

El caso más reciente seguirá generando dolor en esa familia que perdió a una pequeña hija cuando cinco mujeres se dirigían a jugar al fútbol, una actividad que, por momentos, las distraía de la dura realidad en la que viven.

Sin consuelo, familiares de las víctimas solo tienen un pedido para la Justicia: que el conductor de la Nissan Frontier, de 23 años, quede tras las rejas y no salga libre.

Este miércoles, el fiscal Fernando Giunta imputó a Roberto Aucachi por "homicidio simple con dolo eventual en concurso ideal con lesiones leves con dolo eventual". 

Fatalidad en la costanera

No muy lejano en el tiempo, a mediados de diciembre de 2018, una familia se vino de Buenos Aires  para vivir en Mendoza solo por un año. Las vueltas de la vida hicieron que sus dos hijos, de 4 y 6 años, murieran luego de haber sido atropellados, junto a su mamá, por un auto que circulaba a contramano por la calle Matienzo en su intersección con la Costanera Norte.

El agravante de este caso es que el conductor tenía alcohol en sangre y que producto del accidente chocó también a otros vehículos.

Las desgarradoras palabras de los padres de los menores –la mujer fue hospitalizada por algunas heridas– no encontraron explicación alguna sobre lo sucedido. Mejor dicho, sí: que otro borracho al volante mate a personas inocentes que solo pretendían cruzar una avenida.

Entre ambos accidentes relatados, un caso de un chofer ebrio sacudió al departamento Maipú. Seguido por las cámaras de seguridad, el conductor de una Toyota Hilux manejaba con más de 2% de alcohol en sangre.

Cuando intentaron detenerlo, aceleró la marcha de su vehículo y terminó impactando de lleno contra un móvil policial ubicado en el distrito Rodeo del Medio. La situación, afortunadamente, no pasó a mayores y no se tuvo que lamentar víctimas fatales.

Los camioneros hacen de las suyas

La Ruta Internacional 7 conecta a Mendoza con Chile, por lo que el tránsito de camiones en nuestra provincia es altanamente fluido.  Esta situación se torna un tanto complicada a veces, sobre todo cuando los choferes circulan en estado de ebriedad.

Según los reportes oficiales, se detectan casos en que los rodados circulan por la ruta de forma peligrosa –en algunas ocasiones son transportes extranjeros– poniendo en riesgo la vida de automovilistas o pasajeros. 

“Los efectos del alcohol dependen de cada organismo”

El jefe de la Policía Vial, Ernesto Gómez, dialogó con El Ciudadano sobre esta problemática e hizo referencia a los últimos accidentes protagonizados por automovilistas borrachos.

El comisario reconoció que trabajan “en conjunto” con diferentes asociaciones de víctimas (las estrellas amarillas por ejemplo) y que las campañas “son eficientes porque apuntan a la educación y a la contención, sobre todo, de los familiares que pierden a un ser querido como fue el incidente en Guaymallén”.

Sobre el consumo de alcohol por parte de personas que manejan un vehículo, Gómez sostuvo que “todo depende del organismo de cada persona, de cuánto pesa, por ejemplo, y de la forma en que pueda absorber el alcohol que toma. Nosotros tenemos una escala de gramos de alcohol en sangre, pero todo es variable”.

Campañas de prevención, la clave para evitar accidentes

Las muertes en accidentes viales son un tema de nunca acabar en la Argentina.

En Mendoza, las cifras también son altas (163 en 2018, contando solo los muertos en el lugar del hecho), y por eso las campañas  de prevención aumentaron. Al margen de las que realiza año tras año el Gobierno provincial, los municipios también se suman y ofrecen programas alternativos.

Tal fue el caso de Godoy Cruz, que en los años 2011 y 2013 realizó el programa ‘100% sobrio’, una iniciativa que surtió efectos en los jóvenes.

Además, empresas privadas, como Quilmes, tienen sus programas para promover un consumo responsable de bebidas.