Finlandia restringe su comunicación fronteriza con Rusia
Inmigrantes indocumentados tratan de ingresar al territorio de Helsinki a través de los pasos que comunican con la Federación. El contexto de mala relación bilateral creció desde el ingreso de la nación suomi a la OTAN
Por Redacción
La Guardia Fronteriza finlandesa anunció un conjunto de barreras de seguridad que se instalarán en los pasos de Vaalimaa, Nuijamaa, Imatra y Niirala en el sureste del país. Estas medidas responden a cambios en la política de cruces fronterizos de Rusia, según declaró el jefe de asuntos internacionales de la Guardia Fronteriza, Matti Pitkaniitty.
Acusaciones por envío de inmigrantes
Finlandia acusa a Rusia de alentar el cruce de inmigrantes indocumentados hacia su territorio, una afirmación que Moscú niega. A principios de la semana, Finlandia anunció el cierre de estos cuatro cruces, por los cuales transitan aproximadamente 3.000 personas diariamente. El primer ministro del país nórdico, Petteri Orpo, sugirió que la acción del Kremlin busca desestabilizar el país en respuesta a la adhesión de Helsinki a la OTAN.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, respaldó las medidas de Finlandia y criticó la política de los inmigrantes por parte de Rusia. Noruega, vecina de Finlandia, también comunicó que está dispuesta a cerrar su frontera con Rusia si es necesario.
A partir del sábado, los solicitantes de asilo que lleguen a través de Rusia, solo podrán presentar sus solicitudes en dos cruces fronterizos del norte, en Salla y Vartius.
Tensión con Rusia por adhesión a la OTAN
Estos cierres de fronteras coinciden con la creciente tensión entre Rusia y Finlandia a causa de las alianzas militares de Helsinki desde que comenzó la guerra en Ucrania. Finlandia, miembro de la UE, abandonó su política histórica de no alineación militar y se unió a la OTAN de forma definitiva hace no más de dos meses.
La Guardia Fronteriza ha registrado un aumento en las llegadas de inmigrantes indocumentados, en su mayoría de África y Medio Oriente. A pesar de las medidas de contención, defensores de los derechos humanos subrayan la obligación de Finlandia, según tratados internacionales y la legislación de la UE, de permitir que los solicitantes de asilo busquen protección. Finlandia también está construyendo una valla de 200 kilómetros en una sección de la frontera, una obra que está programada para terminarse en 2026.