Otra mala: bajó la exportación de soja por la crisis
La sensación de devaluación inminente, la sequía e imposibilidad de acceder a fertilizantes y las faltas de precio llevan a los productores a no arriesgarse
Por Redacción
Si la situación cambiaria no alcanza para darle dolores de cabeza al Gobierno (y a todos los argentinos en general), ahora se estimó que los productores agropecuarios tienen parte de la cosecha guardada en silobolsas a espera de mejores condiciones de venta. La salida de Martín Guzmán del Ministerio de Economía y la inestabilidad cambiaria hicieron que las ventas de los productores, en especial la soja, caigan a mínimos similares al 2010.
¿Qué dicen los números?
Datos de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara-CEC) muestran que en el primer semestre, las liquidaciones de exportaciones marcaron un récord histórico de USD 19.145 millones. Pero los nuevos vientos de julio cambiaron toda la situación: desaparecieron las listas de precios de insumos tanto nacionales como importados, se paralizaron las operaciones inmobiliarias, la venta de automóviles y, de la mano, las ventas de los productores de soja tuvieron un freno abrupto.
Al mismo tiempo, los datos del Ministerio de Agricultura marcan que las ventas de productores de soja son del 47% del total de la cosecha de la campaña 2021-2022.
¿Por qué el freno?
Según los especialistas, cuando el precio de un bien está nominado en dólares y existe el riesgo de devaluación, todos guardan los billetes y los activos dolarizados. Uno de esto es la soja. Además, la sequía y la falta de acceso a fertilizantes tiende a detener la venta hasta que mejore la situación. Pero también marcan que las retenciones que tiene actualmente la industria, que igualan a las del poroto, conllevan a la especulación en búsqueda del mejor momento.