YPF se enfoca exclusivamente en Vaca Muerta

Como parte de la nueva política de la compañía estatal, que pretende cuadruplicar su valor en 4 años, aparece la decisión de enfocarse de lleno en Vaca Muerta, lo que significa retirarse de los yacimientos maduros, y por ello inició el proceso de venta de 55 áreas de petróleo y gas.

Juan Manuel Gispert, especialista en Economía política y miembro de Centro de Economía Política Argentina (CEPA), expresó.

"Hoy realmente YPF es mucho más valiosa de lo que cotizan sus acciones, si lo miráramos como una empresa en sí misma, gran parte de la baja cotización de YPF tiene que ver con la incertidumbre argentina en particular, pero sobre todo por el proceso de expropiación o de nacionalización como fue realizado, que está sujeto a juicios internacionales que también quitan valor bursátil a la empresa", y añadió "no hay dudas que los activos de YPF, cuando uno mira las reservas de los pozos donde tiene concesión, tiene un valor infinito la empresa".

Con respecto a las nuevas directivas que manejan la empresa, resaltó: “No hay dudas que la estrategia planteada por la conducción de YPF sería una especie de corolario de algo que definió hace varios años, que es priorizar sus inversiones en donde más rentabilidad tenga".

" No quiere decir que en los otros lugares no tenga rentabilidad, sino que prioriza donde tiene más y obviamente desarmando las posiciones de YPF en los pozos maduros, que tienen menor rentabilidad, y concentrarlo en los pozos de mayor rentabilidad, su crecimiento va a ser más acelerado”.

El especialista también repasó la historia de la compañía, que fue determinante para que hoy valga en el mercado una mísera parte de su valor real: "Si uno mira el proceso privado de YPF-Repsol, la empresa no hizo más que desinvertir. El  proceso de Repsol fue muy poco virtuoso para el país, porque usó los pozos rentables en Argentina, desactivó los pozos menos rentables y toda la ganancia no la reinvirtió acá, sino la usó para invertir en otros lugares del mundo donde tenía mejores posiciones".

“Vaca Muerta es un yacimiento que ya estaba en el radar del Repsol y sin embargo, no había hecho ninguna explotación ni intenta buscar un socio para explotarla", agregó, profundizando un proceso en el que terminamos importando combustible. "El estado decide nacionalizarlo y ahí se revierte la tendencia, se modera la curva de explosión de YPF, de caída libre desde el ’96 en adelante, y se empieza a revertir después del 2011-2012 la tendencia, y termina de explotar con Vaca Muerta en 2017-2018".

El caso mendocino

En esta instancia, vale preguntarse cómo impactará esto en las regalías petroleras de la provincia de Mendoza, en la economía local y regional y en las fuentes de trabajo. "En primer lugar, lo que estaba pasando con YPF en Mendoza antes de esta decisión ya era grave".

"na de las razones que explican que Mendoza sea la cuarta provincia más importante del país en términos económicos tiene que ver con YPF, con sus yacimientos y refinería en Mendoza. Eso implicó en gran medida el desarrollo que tuvo la provincia en todas sus ramas, eso irrigó todos los demás sectores", explicó Gispert.

“Entonces, lo que venía pasando ya era malo, las regalías petroleras que recaudaba Mendoza pasaron a ser el 27% de los ingresos provinciales al 9% en los últimos 14 años, una caída brutal. Era una fuente de ingreso muy importante para Mendoza, un cuarto de los ingresos provinciales, hoy son un décimo", precisó, agregando que "así como estaba la cosa no estaba bien".

"Lo cuestionable en los últimos dos o tres gobiernos provinciales es que, siendo una empresa de mayoría estatal nacional y con participación de las provincias petroleras como directores de la empresa, se hizo muy poco para revertir esta decisión de YPF".

"La caída de la inversión, la caída de explotación, caída de perforaciones demuestran que YPF estaba abandonando la producción en Mendoza y nadie vio en los gobiernos provinciales gestiones para que eso fuera distinto, más allá del intento de explotar Vaca Muerta en arena mendocina, que tampoco lo considero exitosa porque demoró muchísimo años ese proceso pero el asunto es que venía fallando", añadió.

Entonces, en cuanto a lo que viene, consideró: “Obviamente esto pone en riesgo, entre todos los rubros que se encuadran en la explotación petrolera, estimamos cerca de 10 mil empleos", e indicó: "hay 3.700, 3.800 que trabajan en el sector de explotación, los pozos, más se suma la construcción porque se le suma el tema civil, camioneros por el transporte de distintos servicios, más un montón de pymes que son proveedoras de servicios en estos pozos.

"Un universo de 10 mil puestos de trabajo donde una parte importante está en riesgo, porque si otras empresas se ocupan de estos pozos no lo harán con la misma dotación de personal que lo hacía YPF, harán un esquema mucho más chico de explotación, con mucha tercerización de servicios y eso no generará mayor demanda de mano de obra en Mendoza".