|29/07/22 07:40 AM

La maldición del oro blanco

Por sus propiedades químicas, el litio se ha vuelto un producto esencial en la producción de muchas industrias –como la aeronáutica, la electrónica y la automotriz–, por lo que es más que necesario reorientar la legislación actual para convertirlo en un recurso estratégico para la Argentina

29 de julio, 2022 - 07:40

Así como en la antigüedad muchos pueblos fueron saqueados por otros más poderosos, simplemente, por poseer yacimientos de oro. Nada cambió con la llegada de la denominada ‘Era Tecnológica’, solo que ahora se habla del oro negro, el petróleo y el oro blanco, el litio.

El litio es un elemento químico ubicado en el primer grupo de la tabla periódica, lo que significa que es uno de tipo alcalino. En estado natural, es un metal blando, de color blanco plata, que se oxida rápidamente al aire y en el agua. Su densidad es la mitad de la del agua, siendo el metal y elemento sólido más ligero.

El litio fue descubierto por Johann Arfvedson en 1817, quien lo encontró en los silicatos y en las micas de una mina de feldespato, en Suecia. En 1818, Christian Gmelin fue el primero en observar que las sales de litio tornan la llama de un color rojo brillante. Ambos intentaron, sin éxito, aislar el elemento de sus sales, lo que finalmente consiguieron William Thomas Brande y sir Humphrey Davy mediante electrólisis del óxido de litio.

En 1923 la empresa Alemana Metallgesellschaft AG comenzó a producir litio mediante la electrólisis del cloruro de litio y cloruro de potasio fundidos.

Por su elevado calor específico, el litio se emplea en aplicaciones de transferencia de calor, y por su elevado potencial electroquímico constituye en un ánodo ideal para las baterías eléctricas. También se le dan los siguientes usos:

  • Tanto el cloruro de litio como el bromuro de litio tienen una elevada higroscopicidad, por lo que son excelentes secantes.
  • Las sales de litio, particularmente el carbonato de litio y el citrato de litio, se emplean en el tratamiento de trastornos mentales, como la depresión y la bipolaridad, así como en otras psicopatologías, ya que se lo considera un estabilizador del estado de ánimo.
  • El estearato de litio es un lubricante de propósito general en aplicaciones a alta temperatura.
  • El litio es un agente altamente empleado en la síntesis de compuestos orgánicos, usado para la coordinación de ligandos a través del intermedio litiado.
  • El hidróxido de litio se usa en las naves espaciales y submarinos para depurar el aire extrayendo el dióxido de carbono de la atmósfera respirable.
  • Es componente común de las aleaciones de aluminio, cadmio, cobre y manganeso empleadas en la construcción aeronáutica, y se ha empleado con éxito en la fabricación de cerámicas y lentes, como la del telescopio de 5,08 m de diámetro de Monte Palomar. También tiene aplicaciones nucleares.

 

Un tesoro a la vista

Argentina, Bolivia, Chile y Perú tienen el 85% de reservas de litio del planeta, pues sus yacimientos se encuentran dispersos en ciertas rocas volcánicas y de sales naturales, pero nunca en forma libre, dada su gran reactividad.

Son especialmente buscados los salares como el de Uyuni, en Bolivia; el del Hombre Muerto, en Argentina, y de Atacama, en Chile. Hay otros de menor tamaño en Manaure (Colombia) y otros yacimientos importantes localizados recientemente en Afganistán. Desde 2010 se investigan en ese país unas reservas cuya magnitud todavía está por determinarse con precisión, pero que podrían cambiar radicalmente la evaluación de los porcentajes antes mencionados y la evolución de los acontecimientos políticos y económicos de aquel país.

Estos yacimientos son buscados especialmente por las fábricas de autos eléctricos, que lo necesitan para la confección de sus baterías. De hecho, se hizo famoso un tuit del CEO de Tesla y SpaceX, Elon Musk, con el que pareció justificar el golpe de Estado en Bolivia contra el presidente Evo Morales, quien unos pocos meses antes había decidido la nacionalización de yacimientos de litio y la construcción local de la batería con una empresa alemana. O en palabras de Musk: “¡Derrocaremos a quién queramos! ¡Bánquensela!”.

Esta semana esa misma tuerca volvió a ser apretada en dos oportunidades. La primera cuando la general Laura Richarson, en su visita a la Argentina, dijo que le resulta preocupante que 21 países de los 31 asignados a su comando hayan firmado la iniciativa china de la Franja y la Ruta de la Seda. “El ‘triángulo del litio’ está en esta región. Hay muchas cosas que esta región tiene para ofrecer, muchos recursos”, especificó Richardson.

La segunda apretada vino por el reconocimiento del exsecretario de Estado John Bolton, que tenía mucha experiencia de golpes de Estado durante su gestión en la administración Trump.

 

Nuestro recurso estratégico

Pero nuestro problema mayor es que la actual legislación constitucional argentina en su artículo 124 establece que corresponde a las provincias el dominio originario de los recursos naturales existentes en su territorio.

Debe interpretarse entonces que el dominio de los recursos naturales corresponde a la Nación o a las provincias, según el territorio en que los mismos se encuentren.

Si consideramos esta norma a la luz, tanto el valor intrínseco del litio – el oro blanco– y a la propia admisión de los países que lo necesitan, habría que reorientar nuestra legislación a hacer a ese recurso estratégico en algo de nivel regional.

Al respecto, el expresidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó que si los países de la región con reservas de litio controlan directamente la explotación de este recurso natural, los volvería “potencias en el mundo". Y que "Occidente no quiere que le demos valor agregado a nuestros recursos naturales”.

Tal vez, este tenga que ser el ejemplo a seguir.

Nota: los datos técnicos sobre el litio y otros minerales fueron obtenidos de Wikipedia.

 

El Doctor Emilio Magnaghi es Director del Centro de Estudios Estratégicos para la Defensa Nacional Santa Romana. Autor de El momento es ahora y El ABC de la Defensa Nacional.