Vivienda impresa en 3D en apenas 44 horas

Las impresoras en 3D han cambiado muchos paradigmas, usándose para cosas tan disímiles como una maqueta o una mano articulada para alguien que perdió esa parte de su cuerpo. Pero si hasta ahora hablábamos de cosas de tamaño pequeño, una empresa japonesa la comenzó a utilizar como sistema de construcción, no siendo la primera en hacerlo, pero sí es una solución disruptiva, sobre todo porque propicia un gran ahorro de tiempo y dinero.

La nueva vivienda realizada con esta tecnología tiene un costo similar al de un auto cero kilómetro de buen nivel, calculado en torno a los 37.000 dólares. Kaito Ogata, director de tecnología de la empresa Serendix, resaltó que esta metodología también se traduce en un gran ahorro de tiempo, ya que la casa de 160 metros cuadrados se fabricó en 44 horas.

El modelo que hicieron en Komaki, una ciudad a cuatro horas de la capital, Tokio, tiene una habitación, un baño y una sala con cocina integrada, que se despliegan en una sola planta y está ideada para dos personas. Las paredes fueron fabricadas íntegramente con máquinas que trabajan de un modo similar a las impresoras 3D hogareñas o aquellas que se emplean en laboratorios y empresas.

A simple vista se ve una suerte de manga que va apilando al material en capas, de punta a punta. Para reducir al máximo los costos de construcción, la compañía imprimió la casa con una mezcla de cemento, al que añadió un aditivo que sirve para un endurecimiento rápido.

Las diferentes partes de la vivienda se “imprimieron” dentro de una fábrica junto al sitio de construcción. Después fueron conectados a las columnas de acero y a los cimientos, de forma similar a como se usan las piezas de Lego. La empresa tuvo que reimprimir algunas paredes que se rompieron en el traslado.

Se trata de un prototipo, que funciona como demostración, pero el proyecto es comenzar a construirlas para habitar para el mes de octubre. Antes, Serendix había fabricado un modelo más pequeño, de 32 metros cuadrados, en apenas un día.