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Consejos para mantener la mente en buen estado

Algunos ejercicios simples pueden prevenir la pérdida de memoria a medida que envejecemos y mantener el cerebro más joven y activo

Por Redacción

17 de agosto, 2023 - 21:20

A medida que envejecemos, nuestra memoria disminuye, pero según el famoso neurólogo norteamericano Richard Restak, muchas veces lo que creemos que son problemas de memoria, en realidad son de atención. Mantener el cerebro activo y joven es posible, y hay una serie de prácticas y ejercicios que pueden hacer mucho por mejorar esa percepción.

 

Prestar atención

La pérdida de memoria, los olvidos, las lagunas, son todos episodios que tienden a aumentar con los años. Sin embargo, a veces son problemas de atención y no de memoria. El especialista norteamericano sostiene que “La falta de atención es la principal causa de las dificultades de memoria”, relata Restak. “Significa que no codificaste correctamente la memoria”, agrega. 

Una forma de prestar atención cuando se aprende información nueva, como un nombre, es visualizar la palabra. “Tener una imagen asociada con la palabra, puede mejorar el recuerdo”, dice.

 

Desafíos de memoria cotidianos

Hay ejercicios de memoria que se pueden llevar a cabo todos los días, como hacer la lista de las compras pero memorizarla y no llevar el papelito, entonces en el supermercado ir visualizando cada uno de los productos de la lista, y además agrega el cocinar como una excelente manera de mejorar la memoria de trabajo.

Subir al auto sin prender el GPS, e ir recorriendo las calles de memoria es otro de los trucos. Un estudio de 2020 sugiere que las personas que usaban el GPS con más frecuencia mostraron un deterioro cognitivo más pronunciado en la memoria espacial tan solo tres años después.

 

Jugar

“Los juegos como el bridge y el ajedrez son excelentes para la memoria, pero también lo son los más simples”, afirma Restak. Su favorito consiste en 20 preguntas, en el que un grupo o persona piensa en una persona, lugar u objeto, y la otra, el interrogador, hace 20 preguntas con un “sí” o “sin respuesta”. Para tener éxito el interrogador debe tener en la memoria todas las respuestas anteriores para adivinar la respuesta correcta.

Otros ejercicios de memoria probados y verdaderos pueden ser recordar a todos los presidentes de un país comenzando desde el actual hasta los más antiguos, y luego el mismo ejercicio pero arrancando del más antiguo. Se puede cambiar por jugadores de un equipo, autores, músicos, mientras que el punto es es involucrar la memoria de trabajo, “mantener la información y moverla en tu mente”, aclara Restak.

 

Leer novelas

Un indicador de problemas de memoria es abandonar la ficción. “Las personas, cuando comienzan a tener dificultades de memoria, tienden a cambiar a la lectura de no ficción”, sostuvo Restak. Esto es porque la ficción requiere un compromiso activo con el texto, comenzando desde el principio y trabajando hasta el final.

 

Evitar la distracción tecnológica

La “distorsión tecnológica” es, según el neurólogo, almacenar todo en su teléfono, lo que significa que “no lo sabe “ y puede erosionar nuestras propias habilidades mentales. “¿Por qué molestarse en enfocar, concentrarse y esforzarse para visualizar algo cuando la cámara de un teléfono celular puede hacer todo el trabajo por vos?” se pregunta.

La segunda forma en que la tecnología es perjudicial para la memoria es porque desvía nuestro enfoque de la tarea que estamos haciendo. “En nuestros días, el mayor impedimento de la memoria es la distracción”, afirmó Restak. Muchas de estas herramientas han sido diseñadas para crear adicción a la persona que las usa y como resultado, nos distraemos seguido.

 

Consultar a un profesional

Tu estado de ánimo juega un papel importante en lo que recordás. La depresión, por ejemplo, puede disminuir en gran medida la memoria. Entre “las personas que son referidas a neurólogos por problemas de memoria, una de las principales causas es la depresión”, dice Restak.

El estado emocional afecta el tipo de recuerdos porque el hipocampo o “centro de entrada de la memoria”, según Restak y la amígdala, parte del cerebro que maneja las emociones y el comportamiento emocional, están vinculados, por lo que “cuando alguien está de mal humor o deprimido, tiende a recordar cosas tristes”, afirma. El tratamiento de la depresión a menudo restaura la memoria.