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Comunicación en pareja: frases que debes evitar para no dañar

Todas las parejas, en algún momento, están en desacuerdo y eso puede llevar a una discusión. Pero es muy importante saber qué no decir para no lastimar 

Por Redacción

06 de diciembre, 2023 - 18:37

Las relaciones de pareja no son fáciles. Tampoco son imposibles, pero, a veces, se dicen o hacen que, sin intención, las dañan. Por eso, los especialistas recomiendan una serie de frases que hay que evitar para no generar problemas.

Generalizar

Decir “vos siempre…” y “vos nunca…” termina cayendo en exageraciones. De esta manera se deja de reconocer los esfuerzos que hace la pareja, lo que lleva a que se ponga a la defensiva y, según los terapeutas, pase de una charla a una discusión. Por ese motivo, recomiendan no ir a lo general y centrarse en lo particular, lo que molesta en ese preciso instante.

 

Deflexiones

El famoso “sí, pero”. Según Alexandra Solomon, miembro del Instituto de la Familia de la Universidad Northwestern y autora de “Love Every Day”, eso expresa que no se entiende ni valida la preocupación de la otra persona. En ese sentido, expresa que es vez de ponerse a la defensiva, es mejor reflejar las palabras y sentimientos de la pareja y decir algo como: “lo que escucho o entiendo de lo que decis es...”

 

Comparaciones

Siempre son detestables. “Deberías parecerte más a” es una pésima idea para una charla. Cada uno es diferente y hay que respetar esas diferencias. Además, la comparación genera celos y problemas de autoimagen y, por lo tanto, autoestima dentro de la relación. Además, pasa la culpa de los problemas sobre la otra persona porque “nunca es suficiente”.

 

Rechazos

“No es para tanto”, “estás exagerando”, “calmate” o “estás loco” son formas de oponerse de cuajo a lo que plantea la pareja, pero sin detenerse a realmente escuchar lo que plantea. Cuando uno de los miembros está muy agitado, es recomendable tomar un descanso de la charla hasta que las aguas bajen.

De cualquier forma, siempre es importante pedir ayuda cuando no se comprende lo que le ocurre a la otra persona. “Ayudame a entender con qué estás teniendo dificultades”, por ejemplo, o “¿Qué necesitás ahora?” son formas de acercar la comprensión y por ahí poder brindar contención en ese momento para conversar lo que ocurre después.

Hay que tener en cuenta que las expresiones anteriores, como “no es para tanto”, quita validez a los sentimientos de la otra persona. Cada uno piensa y siente de maneras distintas y todas las perspectivas son válidas. Por eso, intentar escuchar y entender es clave para cualquier relación.