|03/04/24 07:49 PM

Pruebas de sangre para el diagnóstico del dengue: lo que tenés que saber

El aumento de casos en el país hace que, ante la aparición de síntomas, se considere que el paciente tiene la enfermedad. Sin embargo, hay formas químicas de confirmalo

Por Redacción

04 de abril, 2024 - 07:16

Los casos de dengue aumentan día a día en el país y, más allá de los síntomas como  fiebre alta, malestar general, cefalea o náuseas, entre otros. Pero, además, hay estudios que permiten determinar si se trata de esa enfermedad o de otra. 

El Ministerio de Salud de la Nación informó que, en lo que va de 2024, se registraron más de 163.000 casos de dengue y 129 murieron como consecuencia de la enfermedad. Esto significa que los contagios crecieron seis veces respecto al año pasado y casi 10 cuando se los compara con 2019 y 2020.

La infectóloga Leda Guzzi explicó, al diario La Nación, que desde 24 horas antes de los síntomas y hasta siete días después, el cuerpo contiene virus viables. “Los anticuerpos son de dos tipos, IgM que correlaciona con infección aguda, e IgG que correlaciona con infección pasada.

La IgM comienza a producirse a partir del quinto al séptimo día del inicio de los síntomas y se mantiene en niveles detectables por 12 semanas. Por su parte, la IgG comienza a elevarse entre la segunda y la tercera semana después de la infección y puede mantenerse en niveles detectables de por vida”.

Eso permite que haya distintas pruebas de sangre que llevan a definir si el paciente tiene dengue. “El diagnóstico en los primeros cinco a siete días de la enfermedad, que es la fase aguda, se puede hacer buscando en sangre el antígeno NS1, que es una proteína del virus, o por la técnica de PCR para detectar la presencia de genoma viral porque es cuando el virus está circulando en la sangre.

"Si es positivo, es dengue. Si es negativo [para antígeno NS1], no se puede descartar la infección porque la prueba tiene una sensibilidad de hasta el 72%, pero con una alta especificidad”, explicó Eduardo López, jefe del Departamento de Medicina e Infectología del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez.

“Uno puede hacer diagnósticos por métodos directos, como la búsqueda de antígenos, o indirectos, como la búsqueda de anticuerpos. Los anticuerpos pueden ser IgM, que habla de infección aguda y empiezan a subir desde el cinco o seis desde el inicio de la fiebre, o se puede buscar la globulina G, que es la que puede persistir toda la vida indicando infección previa por dengue”, agregó la infectóloga Elena Obieta,

“Una cosa que hay que aclarar es que en los primeros cinco días uno puede hacer una búsqueda activa del virus, pero los test rápidos para DEN-2 tienen una sensibilidad más baja, por lo que si da negativo en este contexto uno no lo podría descartar.

Sin embargo, en el contexto epidemiológico quedó demostrado que no es costo eficaz hacer un análisis etiológico a todos los pacientes. Aunque sí es importante mantener la vigilancia epidemiológica”, concluyó.

 

Las pruebas y los precios

Los estudios se pueden realizar en laboratorios privados y tienen valores promedio de $40.000 para antígeno NS1 y anticuerpos IgM/IgG y $60.000 para PCR, según información desde la Confederación Unificada Bioquímica de la República Argentina (Cubra).

 

Tratamientos

Es importante aclarar que no hay drogas antivirales contra el dengue. Por ese motivo, se administran analgésicos al paciente para que mejore la sintomatología, salvo en los casos que se requiera internación. 

Los especialistas advierten que el ibuprofeno, el diclofenaco o la aspirina no deben utilizarse, porque podrían generar complicaciones. Por ese motivo, sugieren consumir paracetamol y tomar mucho líquido.

“En general se suele recomendar el paracetamol para disminuir los dolores, en especial las cefaleas que son muy intensas en los cuadros de dengue. El tratamiento para adultos y niños solo difiere en la dosis de droga que uno puede suministrarles, pero en el resto las recomendaciones son muy similares”, comentó López.

“No debe usarse el ibuprofeno o diclofenaco, entre otros, porque puede haber una reacción adversa que baje aún más las plaquetas. Se pueden usar antieméticos para los vómitos y paracetamol, pero no mucho más. Por supuesto, cuando el paciente se interna en general en una primera etapa se le hace una hidratación más agresiva, pero luego la infusión de líquidos se reduce para evitar sobrecargar al paciente”, remarcó Guzzi.

 

TAGS