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El miedo al encierro es una fobia que no se cura pero se trata

Un médico especialista explicó a El Interactivo las causas y cómo se trata la claustrofobia, una afección que dificulta la vida social de muchas personas

Por Redacción

08 de febrero, 2024 - 08:00

Una de las afecciones psicológicas más frecuentes en nuestra sociedad es la claustrofobia, que consiste en el miedo al encierro, a quedar encerrado o a los lugares estrechos. Como toda fobia se expresa en forma de rechazo desproporcionado que puede resultar en un ataque de pánico con sus consecuencias. Como muchas de las afecciones de la salud mental se controlan con tratamiento, según explicó a El Interactivo (lunes a viernes, de 12 a 14, por Facebook y YouTube de Ciudadano.News) el psiquiatra Pedro Castañón.

El entrevistado explicó: “La claustrofobia está dentro de lo que es el espectro de la ansiedad. Dentro de lo que son los trastornos de ansiedad se incluye la fobia, que es un temor exagerado desproporcionado a algo o a alguien, y en el caso de la claustrofobia es una fobia, un temor desproporcionado a estar encerrado, a los lugares pequeños donde es difícil escapar, que podría ser en una habitación. Hay casos de distinta gravedad, hay gente que tiene claustrofobia cuando se mete a un submarino. El que tiene claustrofobia diagnosticada no puede estar en una habitación donde la puerta está entornada. El que tiene claustrofobia tiene un trastorno desproporcionado e irracional".

“Hablar de cura es un término equívoco en el área de salud mental y en medicina porque en realidad curar, si uno fue al médico psicólogo, se habrá enterado que no curamos nada porque uno cree a veces en el concepto utópico de cura que es esto de, me va a dejar de pasar o no va a ver ningún tipo de problema relacionado. Y la verdad que lo que tengo para responder es que la claustrofobia tiene tratamiento y son muy efectivos".

“El tratamiento consiste mayoritariamente en la terapia. Los psiquiatras actuamos cuando hay que medicar algo que tiene que ver con síntomas demasiados groseros, porque si te pones a pensar el momento de la claustrofobia es inseparable del momento de un ataque de pánico, porque en el momento en que alguien con claustrofobia lo metes adentro de la heladera y le pones la silla para que no abra lo que le agarra es un ataque de pánico, entonces farmacológicamente uno los trata como si fuera un ataque de pánico.

 

Cambios en el paradigma psicológico

“Hoy en día se está viendo una inversión de las consultas y antes era un poco más frecuente la claustrofobia, ahora está pasando lo contrario, la gente está tendiendo a buscar un poco el encierro de cierto modo y le cuesta más salir. Ahora es más fobia social, la fobia a lugares abiertos, la fobia a los múltiples estímulos, por el hecho de todo este efecto arrollador que estamos viendo en las redes sociales con las tecnologías, donde la vida de uno en su habitación con la pantalla es hermosa y la vida real apesta. Entonces cuando hay que salir a un evento donde hay personas, hay situaciones climáticas, donde hay conversaciones, apariencia, donde hay estados de ánimo, eso por lo general genera ansiedad y mucha y la gente prefiere participar de un vivo en Instagram en la casa que ir al lugar".

“Se está tendiendo más al encierro que antes. Los seres humanos estamos muy encerrados hoy en día y estamos viendo consecuencias en la salud mental por el encierro. Antes pasaba al revés, estábamos tan poco encerrados que la posibilidad de encerrarnos nos daba claustrofobia.

“Que te obliguen a estar encerrado tiene consecuencias en la salud mental, pero el otro efecto, es el que quiero resaltar, es el peligro a que le encuentren el gustito a quedarte encerrado. A muchos les pasó que encontraron el gusto. Como sociedad tenemos dificultades para encontrar lazos reales con los otros, nos falta compartir en grupos, antes se veían con la familia los domingos, ahora los ven por Whatsapp y le ponés corazones por Instagram". 

“En la medicina y en la salud todo es cuestión de dosis, no hay algo que enferme y algo que cure, todo es una cuestión de graduaciones, por ejemplo la ansiedad misma, con las fobias, la ansiedad en una dosis perfecta es ideal para ser eficiente en el trabajo, con tu familia, poca ansiedad haría mal y mucha te puede dar en claustrofobia, con la tecnología pasa eso, hay que ser inteligente y administrarla y hacer un buen uso de la inteligencia artificial, de las redes sociales puede potenciar su vida y la de los demás y eso sería lo mejor. Las pantallas no son buenas ni malas, la ansiedad no es buena ni mala, todo tiene una medida y si respetamos las medidas gente como yo se queda sin laburo porque si la gente aprende a respetar medidas me voy a tener que buscar otro laburo”.   

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