Cornejo fue el más votado, Petri dio un mensaje contundente y De Marchi se mostró exultante
Con casi 99% de las mesas escrutadas, las PASO en Mendoza dejaron varias lecturas para hacer. Cambia Mendoza mantiene su hegemonía, pero, paradójicamente, el exgobernador está a tiro del lujanino
El Frente Cambia Mendoza fue el más votado en las elecciones PASO de este domingo, obteniendo el 42,68% de los votos, siendo la alianza más votada. La Unión Mendocina, de Omar de Marchi, obtuvo el 20,27% y el Frente Elegí (peronismo y aliados), alcanzó el 15,69%.
Si desarmamos la interna oficialista, Alfredo Cornejo fue elegido por el 60,81% de los votos contra el impactante 39,19% de Luis Petri. La elección que hizo el exdiputado nacional fue excepcional, demostrando que para 4 de cada 10 votantes de Cambia Mendoza, Cornejo ya no es atractivo como posible mandatario provincial. Si generalizamos la cuenta, el 72% de los mendocinos optó por otro dirigente.
El eslogan de Petri “Mendoza está en pausa” es elocuente respecto a los reclamos que se le vienen haciendo al radicalismo local hace tiempo: el estancamiento económicos, el destrato al sector estatal, las paritarias a la baja, la crisis de OSEP, la falta de acción política para avanzar en proyectos clave de mano de la Nación, las pujantes Neuquén y San Juan en evidente contraposición a Mendoza, son algunos de los reproches. Pero quizás el más caro al votante de Cambia Mendoza sea el reclamo de mayor institucionalidad, esa que declama Cornejo, pero está lejísimo de ser una realidad por el copamiento de los organismos de control y una Justicia provincial alienada a los deseos del senador nacional.
Por estas mismas razones se explican los buenos resultados de Omar de Marchi, hombre del PRO que rompió Cambia Mendoza y que al que le fue muy bien. Si logra seducir a poco más de la mitad de los votantes de Petri, el lujanino podría dar el batacazo en las generales y ganarle a Cornejo.
Cornejo sumó 254.566 votos, Petri 164.076 y Omar de Marchi 198.847 sufragios. El batacazo está al alcance de la mano, de ahí la mueca de preocupación del exgobernador en la noche del domingo junto a Patricia Bullrich en pleno festejo, bastante medido por cierto.
Párrafo aparte para el peronismo mendocino, atomizado en cuatro fórmulas que entre todas arañaron el 16% de los votos. “El que gana conduce y el que pierde acompaña”, indica la doctrina peronista. ¿Lograrán Omar Parisi y Lucas Ilardo, los más votados, sumar la militancia, las propuestas y el apoyo de las listas perdedoras? ¿Habrá foto de unidad, con este panorama imprescindible? ¿Lograrán en las generales el apoyo explícito y territorial de los intendentes peronistas? La posibilidad de máxima es mejorar un poco los números de las PASO, pero no mucho más, teniendo en cuenta que la mayoría de los votos se repartieron entre Cornejo, Petri y De Marchi.
Por último, las generales en Mendoza son el 24 de setiembre, un mes y medio después de las PASO nacionales del 13 de agosto, cuando el país podría ser otro, según los resultados del oficialismo, pero sobre todo de las posturas extremas que plantean tanto Patricia Bullrich como Javier Milei. De cómo les vaya y cuál sea en ese momento la situación del país, también dependerá lo que ocurra en Mendoza.