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El crudo análisis del declive de la calidad educativa en la Argentina

Alejandro Castro Santander se refirió al escenario actual de la educación en el país. "Estamos llenando la escuela de humo con distractores todo el tiempo", reconoció

Por Redacción

19 de abril, 2022 - 14:18

Una de las principales preocupaciones de las autoridades, sin importar gestión o color político, es la educación. La calidad de la misma ha sido materia pendiente durante muchos años, al punto tal que un especialista en la materia destacó que el "declive" viene desde hace décadas. Cuál es el escenario actual.

En diálogo con Metaverso por Ciudadano NewsAlejandro Castro Santander, licenciado en gestión educativa y psicopedagogo analizó: “Hay un declive desde hace décadas en la educación. Inicialmente podríamos hablar de la región, de Latinoamérica y el Caribe. Argentina hace unas cuantas décadas estaba muy bien posicionada y luego, a partir de los ’60, empezó el declive, lento al principio y ahora parece más acelerado, donde nos vamos diferenciando del resto de los países de la región, donde ellos de a poco van mejorando y nosotros, o estamos en una meseta o bajando la calidad educativa”.

 

 

Al realizar un análisis de la calidad educativa argentina, Castro Santander remarcó que “estamos llenando la escuela de humo con distractores todo el tiempo, medidas innovadoras que no están favorecidas con otras medidas para que funcionen”.

A este escenario se le suma otra situación que también agrava el déficit educativo y radica en que “tenemos una escuela vieja, del siglo XIX, con docentes y padres del siglo XX y alumnos del siglo XXI. Es una frase muy vieja, pero pasó tanto tiempo que hoy es en realidad: escuelas del siglo XIX y tenemos padres, docentes y alumnos del siglo XXI, la grieta es tan grande que cuesta reconocer”, sostuvo el especialista.

 

El bullying, un flagelo que necesita solución urgente

El destacado psicopedagogo publicó recientemente su libro Rediseñar la humanidad, donde aborda el sentido de volver un poco a los inicios.

“Estamos haciendo todo al revés y aquello que permite el bienestar, ser feliz, es algo que se va perdiendo lentamente. Vivimos en una sociedad crispada y todo necesita una respuesta educativa que nunca estuvo metida en la escuela”, reconoció.

Castro Santander aprovechó la oportunidad para referirse al bullying, uno de los temas más candentes dentro del ámbito educativo.

“Hablamos de convivencia y violencia en el ámbito de las escuelas y cuando uno habla de la violencia es una conducta generalmente aprendida. La gran pregunta es ¿dónde la aprenden los chicos? La respuesta ya la tenemos, generalmente es de los adultos en los ámbitos familiares, desde lo escolar también, el tema del barrio, los medios en general", reflexionó.

Y acotó al respecto: "Los chicos están muy expuestos a la violencia y es lógico que la repitan en el ámbito de la escuela”.

Lo cierto es que, según el profesional, “el clima de convivencia y la violencia boicotean el buen clima y afecta directamente el aprendizaje, el rendimiento de los alumnos, la calidad educativa y echa a muchos de la escuela”.

A modo de ejemplo, Castro Santander refirió que a principios del 2020 se realizó un estudio con Argentinos por la Educación donde se observó a chicos de 15 años, a través de las pruebas PISA 2018 en el área de matemáticas y se descubrió qué pasaba con un adolescente que sufría violencia en la escuela y cómo le afectaba.

“Se comparó quienes no sufrían violencia y quienes sí. Estos últimos puntuaban 40 puntos menos, lo cual significa un año escolar, como si hubieran perdido un año”, reveló.

Y reflexionó que se trata de “cosas concretas y nadie habla del tema convivencia en la escuela o si tenemos normas de convivencia. Cuando alguien hace algo que no se debe le cortamos la cabeza y lo sancionamos”.

Para finalizar, Castro Santander advirtió: “Estas son las cosas que hay que cambiar y el clima entre los docentes ni hablar. La Organización Internacional del Trabajo hace rato viene diciendo que salud y educación son los dos ámbitos donde más se sufre violencia laboral y hasta acoso laboral”.