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Playstation y aire acondicionado: las exigencias de los rugbiers en la cárcel

Los jóvenes protagonizan peleas con celadores y penitenciarios por las condiciones en las que están encerrados

Por Redacción

07 de febrero, 2020 - 14:30

Los rugbiers arrestados se encuentran alojados en la Unidad Penal de Dolores en una celda con camas cuchetas y un único baño, separada del resto de la población carcelaria.

Allí pasan sus horas con graves conflictos con el personal carcelario y la amenaza constante de los demás internos del lugar. Según contaron, lloran, son amenazados y van con mucho miedo a las duchas.

Fernando Báez Sosa.

Varios de ellos se pelearon con unos celadores a quienes les exigieron que les instalen una consola de juegos Playstation y un aire acondicionado.

Uno de los cabecillas de la banda que mató a Fernando Báez Sosa, tuvo algunos cruces con los penitenciarios: "En este lugar no se puede ni cagar tranquilo", esto hace referencia al único inodoro que hay en la habitación que comparten los 10 jóvenes acusados.

Crimen por placer

Mientras, el grupo de rugbiers podrían ser acusados de "homicidio por placer" luego de conocerse el video que uno de ellos grabó con su celular durante la golpiza, había señalado Fabián Améndola, uno de los abogados de la familia de la víctima.

La habitación donde están los rugbiers.

"Si realmente se confirma que estos chicos además de hacer lo que hicieron, lo grababan, vamos a pedir una ampliación de los agravantes, ya que estarían demostrando que mataron por placer, que esto les causaba cierto placer", señaló el abogado Améndola.

El abogado se refirió a las imágenes que habría tomado el celular de uno de los diez rugbiers detenidos, que Fernando Burlando calificó como "un hallazgo insultante a la vida".

"Por el momento, a nuestro criterio, prácticamente todos van a correr la misma suerte. No sabemos si la fiscalía va a mantener el criterio adoptado al momento de las detenciones, ya que realmente se han incorporado  muchas pruebas y seguramente se va a poder definir con más precisión el rol que tuvo cada uno de los autores en lo que fue catalogado por testigos como una masacre", añadió Améndola.