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Cristina Kirchner no contestó preguntas ante Bonadio

Acusada de ser la jefa de una asociación ilícita, la expresidenta sigue desfilando por Comodoro Py y presentó en escrito ante el juez federal Claudio Bonadio

Por Redacción

03 de septiembre, 2018 - 16:12

La expresidenta Cristina Kirchner negó las acusaciones por supuesto cobro de sobornos en la obra pública, criticó el accionar del juez Claudio Bonadio y dijo que al haber éste ampliado el tiempo de investigación debía citar al actual presidente Mauricio Macri ya que "se encontraba al frente del grupo empresarial familiar".

"Se habla aquí de una extensión temporal del objeto procesal de la causa y no se convoca a prestar declaración indagatoria a los dueños de las empresas más importantes del país que supuestamente habrían participado en los episodios que se dice estar investigando. Hasta el 2006 Macri se encontraba al frente del grupo empresario familiar, el cual según los dichos de algún "arrepentido" también habría formado parte de la cartelización de la obra pública", expresó la exmandataria en un escrito.

La audiencia duró poco más de veinte minutos y es la segunda vez que la convoca Bonadio en esta causa, y es en función de haber extendido el plazo de investigación desde el 2003 al 2015, cuando antes era desde el 2008.

 

Mendocinos arrepentidos

El empresario Enrique Pescarmona, que hasta hace poco era el referente principal de la empresa de nuestra provincia Industrias Metalúrgicas Pescarmona (IMSA) es hasta ahora el último arrepentido y se espera que aporte mas pruebas al ya voluminoso expediente que investiga la trama de la corrupción por sobornos en la ejecución de la obra pública. 

Un día antes, el número dos de IMPSA, Rubén Valenti, había sido aceptado por el juez como arrepentido colaborador de la Justicia y logró su libertad luego de estar 25 días tras las rejas. 

Tanto Pescarmona como Valente son mencionados varias veces en los cuadernos en que el chofer Oscar Centeno afirma que su exjefe Roberto Baratta se reunió 19 veces con el número dos de IMPSA en el lujoso hotel porteño Feirs Park, además de otro encuentro que se llevó a cabo en el domicilio particular de Pescarmona en la Capital Federal. 

Según los comentarios salidos de Comodoro Py, en sus declaraciones ambos empresarios afirmaron haber sido extorsionados por la administración de los Kirchner para que aportaran dinero con el objetivo de destrabar permisos de obra. 

Los pagos serían de alrededor dos millones ochocientos mil dólares, y fuentes cercanas a la causa hablan del enojo de Pescarmona,  quien habría dicho: “Me arrepiento de haberles pagado a esos hijos de puta”, además de recordar que por culpa de ellos la empresa estuvo al borde de la quiebra.

 

Cada cual atiende su juego

Mientras unos se arrepienten y colaboran otros optan por negarse a declarar. Tal es el caso del empresario Gerardo Ferreyra, de Electroingeniería, quien parece ser un hueso duro de roer y uno de los que insiste en que el dinero recibido era para colaboraciones voluntarias por afinidades políticas, afirmación que día a día se cae por su propio peso. 

Néstor Otero es otro que no puede disfrutar la libertad y seguirá detenido complicado por declaraciones de otro sospechado. Mientras, Oscar Thomas, el exmandamás de la empresa binacional Yaciretá durante los doce años del kirchnerismo, continúa prófugo a pesar del aumento de la recompensa, que ya es de un millón de pesos, para quien aporte datos sobre su paradero. Mientras se lo busca en Paraguay, hay quienes afirman que el lugar más seguro para esconderse es la provincia de Misiones.

Thomas es un factor clave en este entramado de corrupción, ya que manejaba la caja para solventar gastos para las políticas kirchneristas en todo el Nordeste argentino.

Uno que perdió la posibilidad de ser arrepentido y se le dictó nuevamente la prisión es el financista Ernesto Clarens, a quien no se le homologó esa figura, ya que el juez entendió que aportaba poco a la causa. Clarens es una figura clave para saber sobre la ruta del dinero mal habido que manejaba el matrimonio presidencial, pero por ahora se lo notó con una repentina falta de memoria y pocas ganas de colaborar.

 

Chediak acusa a De Vido

En tanta declaración, el expresidente de la Cámara Argentina de la Construcción Juan Chediack, en calidad de imputado colaborador declaró haberle pagado coimas personalmente al exministro de Planificación Federal Julio De Vido. 

Chediack dijo haberse sentido amedrentado en aquella ocasión y que le explicó que su empresa estaba en crisis desde el 2001; pero el exministro lo trató de llorón y le señaló que tenía que entender que de ahora en más las cosas funcionaban de esa manera, y fue así que al tiempo empezó a llevarle dinero a la casa del exministro de la que recuerda el detalle de que en un costado del living había un bonsái.

 

Algo cambió definitivamente

Por fin se aprecia el avance a paso firme de la Justicia en una causa en la que cada día que pasa aparecen nuevas pruebas que permiten suponer que en esta oportunidad habrá mas de un corrupto tras las rejas. 

Y vale aclarar que esta causa no es una cortina de humo para disimular los errores económicos del Gobierno, con suba del dólar incluida. Por el contrario, aquellos nunca lograrían tapar la trama de corrupción más grande que se recuerde en el país.