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Un estudio proyecta que los japoneses tendrán el mismo apellido en 500 años

La normativa japonesa establece que al casarse, marido y mujer deben adoptar el mismo nombre de familia. Serán todos de apellido Sato

Por Redacción

01 de abril, 2024 - 14:03

Un estudio dirigido por la Universidad de Tohoku, prevé que hacia el año 2.500 todos los japoneses se apellidarán ‘Sato’, el apellido más común en Japón,  por la tendencia de declive demográfico y a la normativa civil vigente. En el país asiático solo se emplea un apellido y un nombre de pila.

Sato’ ocupa el primer  lugar del ranking de los apellidos más frecuentes entre los japoneses. En 2023, llevaba ese apellido un 1,5 % de la población nipona, según las estimaciones de un estudio liderado por el profesor Hiroshi Yoshida, del centro de Investigación Social y Económica del Envejecimiento de Universidad de Tohoku.

El académico calcula que el número de personas apellidadas Sato se multiplicó por 1,0083 en los últimos años, y realizó una proyección de cómo evolucionaría esa cifra teniendo en cuenta las tendencias demográficas de envejecimiento acelerado y descenso del número de nacimientos, que resultan en pérdida de población.

Su estudio también contempla la normativa japonesa que establece que al contraer un matrimonio, marido y mujer deben adoptar un mismo nombre de familia, ya sea el de él o el de ella. Además, en el país sólo se emplea un apellido y un nombre de pila.

En base a esto, Yoshida calcula que en el año 2446 la mitad de la población japonesa llevará el apellido ‘Sato’ y que para el 2531 la totalidad de los nipones tendrán el mismo apellido.

El estudio se publicó en medio del debate en Japón sobre la normativa civil respecto a los apellidos. Muchos reclaman, incluso del partido gobernante, que marido y mujer deberían conservar sus nombres de familia al casarse, o incluso llevar dos apellidos, como es el caso de países como España.

Según Yoshida el informe busca “ilustrar con números el problema que supone la separación selectiva de apellidos en los matrimonios”.

“Si todo el mundo se apellida ‘Sato san’ (‘Don o Doña Sato’), no quedará más remedio que emplear únicamente el nombre de pila para identificarse. Eso no sería un escenario ideal”, advirtió el profesor, en declaraciones a medios locales.

Con información de EFE