La automotriz japonesa Toyota, en alerta máxima por ciberataques
La gran mayoría de las fábricas en el archipiélago nipón vieron afectada su producción. Temor a que pueda ocurrir en las filiales mundiales, como en su planta de Argentina
Por Redacción
Uno de los fabricantes de automóviles más grandes a nivel mundial, la japonesa Toyota, suspendió de forma repentina en las primeras horas de este martes las operaciones en doce de sus plantas ubicadas en territorio nipón. La causa sería un fallo en el sistema automatizado de solicitud-provisión de autopartes y montaje, y sin previsión exacta de cuándo podría restablecerse el normal funcionamiento de la cadena de producción.
El fallo del sistema
"Se trata de un fallo del sistema que impide los pedidos de las piezas. No sabemos cuándo se podrá recuperar, pero estamos intentando retomar la operación", dijo un portavoz de la compañía a medios de prensa, y apuntó que, “en un principio, no se podría confirmar que se trate de un ciberataque”.
La compañía cuenta con catorce fábricas en todo el país, de las cuales siguen operativas dos: la de la ciudad de Miyawaka, en la prefectura de Fukuoka, y la de la localidad de Oyamazaki, en Kioto, según detallaron directivos de la firma automotriz.
La suspensión de este martes se suscita después de que, en el pasado mes de marzo, la empresa se vio obligada a interrumpir la producción en todas sus fábricas ubicadas en suelo japonés, a raíz de un ciberataque en uno de sus proveedores que afectó el buen funcionamiento de toda la plataforma de pedidos. Por lo tanto, no se descarta que el fallo actual pueda ser consecuencia de una nueva intromisión de hackers.
El incidente de marzo, llevó a Toyota a suspender todas las operaciones en sus 14 plantas de producción nacionales, incluyendo las de sus marcas subsidiarias Hino y Daihatsu, lo que supuso una notable caída de la producción prevista de 13.000 unidades, superior al 5 % del volumen mensual pretendido.
La relación con Rusia y advertencia a filiales mundiales
Autoridades judiciales japonesas analizaron el caso para determinar su origen y responsables poco después de que varios países alertaran de la posibilidad de que Rusia efectuara ataques de este tipo sobre objetivos de países que han apoyado las sanciones contra el Kremlin y provisto de material bélico y financiamiento a Ucrania en su lucha contra Moscú.
Todas las filiales de Toyota a nivel global, incluido el polo productivo de Zárate, en provincia de Buenos Aires, fueron advertidas de los problemas actuales y se les pidió especial atención para que sus centros de producción y ensamblaje no sufran problemas similares.