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Boris Johnson, cada vez más solo, aguanta como puede

El primer ministro británico sufrió la renuncia de más de treinta miembros de su gobierno y se encuentra contra la espada y la pared

Por Redacción

06 de julio, 2022 - 22:21

Boris Johnson, el primer ministro británico, sufrió la dimisión de más de treinta miembros de su gobierno y se encuentra entre la espada y la pared luego de recibir múltiples pedidos de que renuncie. Además, despidió a Michael Gove, su mano derecha durante la campaña de 2016 por el Brexit y ministro de Vivienda.

Solo contra todos

Distintos miembros de su partido abandonaron al primer ministro. Entre los más destacados se encuentra Priti Patel, quien fue su ministra de Interior y su principal defensora. La miembro del Partido Conservador se dirigió a Downing Street, sede del gobierno del primer ministro, para informarle que perdió el apoyo del partido y debe renunciar.

Se niega a dimitir

"Realmente no creo que nadie en este país quiera que los políticos se dediquen ahora a hacer campaña electoral", aseguró hace unos días. Luego, ante la Cámara de los Comunes, comentó que "el trabajo de un primer ministro en circunstancias difíciles, cuando se ha recibido un mandato colosal, es seguir adelante y eso es lo que voy a hacer". 

Desde la oposición, el laborista Keir Starmer, consideró que da un "espectáculo patético" en "el último acto de su carrera política".

La crisis política británica comenzó hace unos meses pero explotó esta semana con la renuncia de los ministros de Salud, Sajid Javid, y Finanzas, Rishi Sunak. Posteriormente, también se alejaron del gobierno treinta miembros del gabinete de todos los rangos.  

No es la primera vez contra las cuerdas

En junio, Boris Johnson enfrentó un voto de censura de sus propios diputados, pero varios de sus legisladores lo salvaron. Por normas del partido, ese procedimiento no se puede repetir hasta el año que viene, pero sus propios compañeros le exigen cambios.

Esta claro que el "partygate", un escándalo por las fiestas organizadas en Downing Street durante los confinamientos por el coronavirus, junto con las acusaciones de amiguismo, los irregulares arreglos de la residencia oficial y los escándalos sexuales de miembros de su gobierno dejan al primer ministro muy mal parado.

Las encuestas muestran que su imagen está peor que nunca y que los británicos lo consideran un mentiroso. Para colmo, luego de que se destapara que el encargado de la disciplina partidaria, Chris Pincher, tocó de manera inapropiada a otros legisladores y presentara la renuncia, Johnson aseguró que no sabía que Pincher tenía esas inclinaciones. Sin embargo, los medios británicos demostraron lo contrario y el primer ministro reconoció haber olvidado que conocía hechos anteriores.