Rodolfo Corominas Segura, el mendocino que integró el FMI
Nacido en Uruguay, el político llegó a nuestra provincia siendo muy niño y llegó a desempeñarse como gobernador, para después ocupar importantes cargos en el ámbito nacional
Desde hace más de 50 años, el nombre de Fondo Monetario Internacional viene sonando en los oídos y en el recuerdo de todos los argentinos. Sabemos que es un organismo financiero creado en Estados Unidos en 1944.
Desde casi su creación, nuestro país ha sido un importante tomador de préstamos de esa entidad y dejando en el camino una exorbitante deuda externa, lo que produjo una marcada diferencia en gran parte de los ciudadanos en contra. Marchas de protesta para no pagar la deuda, debates parlamentarios y hasta una canción pop llamada Estoy tocando fondo, de las legendarias Viuda e Hijas de Roque Enroll, marcaron épocas difíciles.
Hasta aquí, todo lo sabemos, pero lo que tal vez ignoramos es que en 1956 un mendocino y exgobernador de la provincia, llamado Rodolfo Corominas Segura, ocupó el cargo de director ejecutivo del Fondo Monetario. Recordemos en esta nota algo más de él y de su gestión en Washington por aquellos años.
Uruguayo de nacimiento y mendocino por adopción, Corominas Segura nació el 28 de octubre de 1891 en Montevideo y se nacionalizó argentino.
Siendo muy niño llegó a Mendoza y realizó los estudios primarios y secundarios. Luego viajó a Buenos Aires, donde se doctoró en Jurisprudencia y Ciencias Sociales.
Con su flamante título regresó a nuestra provincia y se radicó en ella. Su ingreso al mundo político se dio cuando asumió como concejal por la Capital en 1924. Posteriormente siguió militando en el Partido Demócrata nacional y ocupó la banca de diputado de la Nación entre 1932 y 1937.
Luego de ser gobernador presidió la Corporación de Transportes de la Ciudad de Buenos Aires hasta 1943, año en que retornó a Mendoza, en donde falleció el 2 de junio de 1967.
Un gobernador progresista
Rodolfo Corominas Segura fue el tercer gobernador de Mendoza por el Partido Demócrata. Ocupó el cargo el 18 de febrero de 1938, acompañado por Armando Guevara Civit como vice.
En su Gabinete se encontraban Adolfo Vicchi como ministro de Gobierno; Edmundo Correas, en Hacienda; José María Alurralde, en Industria y Obras Públicas, y Luciano Peltier, en Finanzas.
Durante su gestión, Corominas Segura apostó al robustecimiento de la economía de Mendoza, especialmente en la producción de petróleo. En 1940 la provincia firmó un convenio con YPF para asegurar mejores regalías con la Nación. También se otorgaron préstamos, a través del Banco de Mendoza, para promover nuevas industrias.
Su gobierno dio continuidad a la política de obras públicas como la caminera e hídrica: se ejecutaron más de 600 kilómetros de nuevos caminos y se buscó más eficiencia en el riego. En este período tuvo lugar la inauguración del hotel de Villavicencio y se hicieron trabajos de remodelación en el Cerro de la Gloria y el Zoológico.
En educación, uno de sus mayores logros fue la creación de la Universidad Nacional de Cuyo y las escuelas regionales técnicas. Mientras tanto, en el área de salud se licitó la construcción del Hospital Central y el 11 de febrero de 1941, el mandatario colocó la piedra fundamental para iniciar su construcción.
En el ámbito laboral se tomaron medidas para mejorar el salario y las vacaciones. Entre otros temas comenzó a funcionar el Departamento Provincial del Trabajo. Su periodo gubernativo finalizó el 18 de febrero de 1941.
El hombre del fondo
Si en la esfera de la vida provincial llegó a desempeñarse en el cargo de primer mandatario de Mendoza, también se destacó en una labor sobresaliente en la gestión nacional y en el plano de las relaciones internacionales.
El 25 de setiembre de 1956, los delegados latinoamericanos lo designaron miembro activo ante el Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional, organismos que lo eligieron tiempo después en Washington como uno de sus directores ejecutivos en representación de la Argentina y de otras naciones del continente.
Durante su función, realizó importantes gestiones, no solamente para apoyar a los países latinoamericanos, sino también para la Argentina y Mendoza.
Luego de dos años de integrar el staff ejecutivo, se retiró definitivamente en 1958, aunque después sirvió como asesor y miembro de consulta.
Así, Rodolfo Corominas Segura quedó en la historia como el primer argentino y mendocino por adopción que formó parte del Fondo Monetario Internacional.