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Jacinto, el hermano gemelo de Agustín Álvarez

Huérfano a los 3 años, llegó a ocupar la gobernación de la provincia después de haber ejercido la medicina, su verdadera vocación, a la que volvió tras ocupar una banca en el Senado nacional

27 de septiembre, 2021 - 09:16

Ahora casi desconocido para la mayoría de los mendocinos, en su tiempo Jacinto Álvarez fue uno de los grandes personajes que tuvo la provincia a fines del siglo XIX y entradas las primeras décadas del XX. Además de ser el hermano gemelo del destacado abogado, militar, filósofo y científico Agustín Álvarez, descolló en la política y ocupó el puesto de gobernador y una banca como senador de la Nación.

 

Una triste niñez

Jacinto Álvarez nació el 15 de julio de 1857 en la ciudad de Mendoza minutos después que su hermano gemelo Agustín, en el seno de una familia tradicional de la provincia por parte paterna.

Jacinto y Agustín crecieron junto a sus hermanos y fueron los más mimados del grupo. Pero la desgracia cayó sobre ellos y miles de personas cuando se produjo un gran sismo durante la nefasta noche del 20 de marzo de 1861, que marcó de por vida al pequeño Jacinto y también a su mellizo al perder a sus seres queridos.

De los siete integrantes de la familia Álvarez, cinco fallecieron, incluyendo a sus padres.

Días después del terrible terremoto que provocó que la ciudad quedara reducida a escombros, las patrullas de rescate todavía buscaban a algunos sobrevivientes, mientras que otras recogían a las víctimas fatales.

El panorama era tétrico, y al no tener noticias de la familia Álvarez, sus parientes los dieron a todos por muertos. Pero ocurrió un milagro cuando un vendedor de jarilla que por casualidad pasaba frente a la propiedad totalmente destruida de los Álvarez, escuchó el llanto de dos niños. Inmediatamente, el hombre llamó a otras personas para que lo ayudaran a extraer de entre adobes, maderas y cañas, a los gemelos de sólo 3 años que estaban con vida.

Los dos huérfanos fueron adoptados por uno de sus familiares.

 

Médico por vocación

A pesar de esta difícil situación, los gemelos crecieron en un hogar en el que se esmeraron en cuidarlos y brindarles educación. Tras cursar la escuela primaria, ambos asistieron al Colegio Nacional de Mendoza.

Luego de concluir los estudios secundarios, Jacinto partió rumbo a la Ciudad de Buenos Aires para ingresar en la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires.

El joven Álvarez se recibió de doctor en Medicina y al poco tiempo regresó a Mendoza, en donde se estableció, e inmediatamente fue nombrado médico forense de la provincia, cargo que ejerció durante varios años.

En 1886 se produjo en Mendoza una epidemia de cólera que causó más de 4.000 muertos y puso en pánico a toda la población. En ese terrible escenario, Álvarez fue uno de los médicos que asistieron a cientos de personas afectadas por el flagelo, y también dictó medidas de prevención.

 

Jacinto Álvarez falleció el 3 de julio de 1933, y sus restos descansan en el Cementerio de la Ciudad de Mendoza.

 

El político

Además de la Medicina, el doctor Jacinto Álvarez se involucró en la política y ocupó varios cargos públicos.

En 1887 se postuló por primera vez en las elecciones municipales obteniendo el puesto de concejal en la comuna capitalina.

El 8 de octubre de ese mismo año, Jacinto contrajo matrimonio con Elina Calderón de la Barca, con quien tuvo varios hijos.

Luego de ejercer aquel cargo, se postuló en 1898 para vicegobernador de la provincia junto a su titular, el doctor Emilio Civit, y ganaron la elección.

A poco de ejercer como gobernador, el doctor Civit renunció a su cargo para asumir en el Ministerio de Obras Públicas de la Nación, y por esta causa el entonces vicegobernador doctor Álvarez pasó a ocupar su puesto.

El gobierno de Álvarez efectuó varios cambios en la provincia. Uno de los más importantes fue oficializar el Banco de Mendoza. También ejecutó el reajuste del empréstito de 1888, que trajo grandes beneficios económicos y financieros para la provincia. Además, bajo su mandato, se sancionó la Ley Orgánica de los Tribunales, redactada por los doctores Conrado Céspedes y Alfredo Amaya.

En 1899 creó el Boletín Oficial de la Provincia, que en la actualidad se sigue editando. Durante su gobierno también fue reformada la Constitución provincial. Luego de finalizar su mandato, Álvarez fue elegido senador nacional, banca que ocupó varios años.

 

La filantropía como deber

Después de ser senador dejó la política para volver a su profesión de médico, llegando a ejercer como director del hospital El Carmen. 

Miles de pacientes sin recursos fueron atendidos por don Jacinto en forma gratuita, y en varias ocasiones costeó de su bolsillo los medicamentos para los que no podían adquirirlos. Entre otras acciones benéficas, ayudó a cientos de adultos mayores sin ningún tipo de recursos.

En 1914 falleció Agustín, su hermano gemelo, lo que le produjo un gran dolor y tristeza, pero pudo reponerse gracias al apoyo incondicional de su familia.

Jacinto Álvarez falleció el 3 de julio de 1933, y sus restos descansan en el Cementerio de la Ciudad de Mendoza.