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¿Por qué Lotocki puede seguir operando? La situación judicial del médico

El médico Aníbal Lotocki dijo que no se considera responsable de los problemas de salud que afectan a la actriz, a quien operó en el 2011 y que hoy se encuentra hospitalizada en estado crítico debido a diversas complicaciones

Por Redacción

29 de junio, 2023 - 09:25

La actriz y modelo Silvina Luna (43) se encuentra en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Italiano, ubicado en el barrio de Almagro, en la ciudad de Buenos Aires. Desde el entorno de la vedette, piden donantes de sangre y cadena de oración para su recuperación.

Su estado de salud empeoró debido a una negligencia médica por parte del doctor Aníbal Lotocki.

Por su parte, en las últimas horas, el médico Aníbal Lotocki afirmó que no se hace responsable de la situación médica que afecta a Luna, a quien operó en el 2011, y que actualmente se encuentra hospitalizada en condición crítica.

"Lamento mucho lo que está pasando, y me siento muy mal por eso", dijo Lotocki, pero advirtió que el cuadro actual de su antigua paciente "no tiene nada que ver" con el procedimiento que le practicó, y lo vinculó a "un estado previo" de la mujer.

En ese sentido, reveló que "hay estudios de Silvina, del 2010, que mostraban una gamaglobulina muy alta", que puede derivar en diversas afecciones como infecciones, cáncer y trastornos por inmunodeficiencia.

En el 2011, Silvina Luna se sometió a una intervención quirúrgica estética realizada por Lotocki, en la cual se le implantó metacrilato, una sustancia que se considera potencialmente dañina para la salud. A partir de ese momento, la actriz comenzó a experimentar una serie de problemas de salud que se fueron complicando con el tiempo, hasta llegar a desarrollar una insuficiencia renal crónica. Como consecuencia de esta condición, Luna se ve obligada a someterse a sesiones de diálisis tres veces por semana, con una duración de cuatro horas cada día.

 

"Lamento mucho lo que está pasando, y me siento muy mal por eso", dijo Lotocki

 

Lotocki, el metalicrato y su situación judicial

El profesional médico remarcó que el metacrilato "está aprobado para ser colocado en los glúteos", tal como la había solicitado Luna, quien "sabía lo que le iba a colocar en la operación".

"Lo usé porque estaba permitido", puntualizó Lotocki, quien fue condenado a cuatro años por "lesiones graves", aunque la misma no está firme y puede seguir ejerciendo su profesión.

Además de la denuncia presentada por Silvina Luna, el médico Lotocki también había sido condenado por las demandas interpuestas por otras tres actrices: Pamela Sosa, quien fue pareja del médico en el pasado; Gabriela Trenchi y Stefanía Xipolitakis. Todas experimentaron consecuencias negativas a raíz de sus procedimientos médicos con el doctor Lotocki y buscaron justicia a través del sistema legal.

En una que concedió al noticiero Telenoche, de Canal 13, el médico advirtió que "la Justicia todavía debe determinar si se trató de un efecto colateral del producto o una lesión", tras la operación que le practicó a Luna hace 12 años.

“Ninguna de mis pacientes terminó en terapia intensiva, y llevo alrededor de 7.000 operaciones”, en referencia a la cirugía plástica, e insistió en que la actriz tenía problemas de salud previos que derivaron en su estado actual.

En ese sentido, expresó que "si hubiera sabido que iba a pasar esto, yo le hubiese hecho juicio a la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica)”, el organismo encargado de aprobar, en este caso, el producto químico en cuestión.

Sobre la situación de Luna, su abogado Fernando Burlando confirmó que se encuentra “en estado crítico”.

Además, el letrado reiteró su pedido para que le sea suspendida la matrícula de médico a Lotocki, reclamo que la justicia desestimó hasta el momento, a pesar de las condenas que ya pesan en su contra, a las que se sumó a principios de este mes un procesamiento por "homicidio simple por dolo eventual” a raíz de la muerte de un paciente.

“Esta es la justicia que tenemos; nosotros siempre pedimos que fuera inhabilitado para ejercer esa profesión, pero no se nos escuchó. Lo único que pido es que se haga una cadena de oración para que Silvina pueda pasar este momento”, sostuvo en diálogo con Télam.

Lotocki causó lesiones en el cuerpo a Trenchi, Luna, Xipolitakis y Sosa con el uso de un relleno que contenía microesferas de polimetil metacrilato (PMMA), en lugares del cuerpo en los que está prohibido su uso y en cantidades superiores a las sugeridas por la comunidad científica.

Además, el cirujano fue procesado a principios de este mes por “homicidio simple con dolo eventual” por la muerte de Rodolfo Cristian Zárate, tras la resolución del juez Luis Schelegl.

“El fallecimiento de Zárate fue probablemente causado por la pluralidad de las graves acciones que Lotocki cometió antes, durante y después de la intervención quirúrgica del paciente que tenía bajo su responsabilidad”, dijo el fiscal Pablo Recchini al pedir ampliar la declaración indagatoria al médico en abril de este año.

Resulta llamativo que, mientras Silvina Luna lucha por su vida, el cirujano plástico permanezca en libertad y con su licencia médica vigente. Además, Lotocki se muestra muy activo en las redes sociales, a las que dedica tiempo y recursos al contratar una agencia para gestionar su comunicación.

Con cerca de 728 mil seguidores entre sus dos cuentas, una verificada y otra de respaldo, el médico continúa publicando casos que considera exitosos, promocionando sus tratamientos e incluso compartiendo testimonios que respaldan su trabajo y desacreditan las acusaciones de mala praxis.

El juez penal Luis Schlegel procesó a Aníbal Rubén Lotocki por homicidio simple con dolo eventual y le trabó un embargo de $4.800.000 debido a la muerte de un empresario que se sometió a una cirugía para reducir el tejido graso en abril de 2021. Esta acusación conlleva una pena de hasta 25 años de prisión.

Además, el juez Schlegel solicitó que en los próximos días se cite a declarar a los cinco profesionales que participaron en la operación.

Lotocki ya había sido condenado previamente a cuatro años de prisión por el Tribunal Oral Criminal 28 debido a las graves lesiones sufridas por cuatro pacientes que fueron intervenidos por él.