|05/03/20 08:03 PM

Guaymallén: amenaza de bomba e intento de suicidio en la municipalidad

El edificio municipal fue víctima de un llamado telefónico y de un confuso episodio en el cual una mujer quiso quitarse la vida en el cuarto piso aduciendo que es la madre del detenido

10 de marzo, 2020 - 16:53

Empleados y personas que asisten a realizar algún trámite a la Municipalidad de Guaymallén pudieron haber sido víctimas de una verdadera tragedia. 

¿Por qué? Porque este jueves se logró detener a un hombre que tiene vinculación con una amenaza de bomba telefónica realizada el martes a las 10.30.

Luego de un minucioso trabajo de investigación del Departamento Tecnológico, la Policía detuvo a un joven de 30 años y quien al momento de su detención, llevaba consigo tres celulares, uno de ellos sin tarjeta SIM.

El secretario de Gobierno del municipio, Nicolás González, le confirmó a El Ciudadano que el llamado de amenaza de bomba fue directamente al área de Rentas. 

“Inmediatamente se dio aviso al área de Explosivos de la Policía de Mendoza y a Defensa Civil de la comuna, quienes actuaron previo a desalojar el edificio por una hora. Quiero destacar el trabajo de las fuerzas policiales”, manifestó el funcionario. 

El Primer Juzgado Penal Colegiado tomó intervención en el hecho que fue caratulado como ‘intimidación pública’, delito que según el Código Penal tiene una pena de dos a seis años de prisión. 

Esta historia no sólo terminó acá ya que ayer en la siesta sucedió un confuso episodio con una empleada municipal que podría tener alguna vinculación con esta amenaza. 

De acuerdo al relato de González, la mujer -que se desempeña como serena en el área de Servicios Comunitarios-  subió hasta el cuarto piso y tomó del cuello a una compañera aduciendo que su hijo era el detenido por la falsa bomba.

“La situación fue realmente tensa porque luego de que lograron que suelte a su compañera, intentó tirarse por la ventana. Fue llevada a la Comisaría 9ª de calle Libertad y realmente no sabemos a ciencia cierta si tiene vinculación con la amenaza del martes”, explicó.

Sin dudas, lo vivido en el edificio municipal de Guaymallén fue realmente extraño y los mismos funcionarios no encuentran explicación a lo sucedido. “No sabemos porque hicieron esto, si por picardía y por alguna maldad”, reconoció González.