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Caso del médico asesinado: prisión preventiva sin definición

Este martes se hizo una audiencia para confirmar o no la prisión de las imputadas (la viuda y una amiga tarotista) por el crimen del médico en Las Heras pero se pasó a un cuarto intermedio 

20 de noviembre, 2019 - 11:00

El crimen del médico León Burela, ocurrido en abril de este año en el departamento Las Heras, sigue siendo un caso llamativo y con ingredientes de todo tipo. 

Este martes, en la sala 4 del Poder Judicial de la provincia, Mónica Castro – vecina de la víctima y tarotista- y Elizabeth Ventura – viuda- enfrentaron una audiencia de prisión preventiva que estuvo presidida por el juez de Garantías, Fernando Martínez. 

En la misma se tomó la resolución de pasar a un cuarto intermedio, con fecha y horario a definir, ya que una de las partes no pudo alegar.

Las mujeres, actualmente imputadas por la muerte del médico, presenciaron los alegatos de la fiscal de Homicidios, Claudia Ríos, y los abogados defensores, que para Ventura son Cristian Leyton, Edgardo Izura y Agustín Magdalena, mientras que la “bruja”  está representada por Susana Soleti y Andrés Furfani. 

Entre sus argumentos, Ríos fue a fondo contra las mujeres al señarlas como las “autoras penales de este homicidio” y solicitando que continúen presas porque “existe riesgo de entorpecimiento de la causa”.

La fiscal hizo una descripción del hecho que se investiga y exhibió un audio telefónico donde Ventura dialoga con Castro, y se escucha que hablan de un “sacrificio” que ésta habría hecho con un cardiólogo con el que la viuda de Burela mantenía una relación paralela. "Contale (a Antonia) que mandaste a matar a tu marido, si le contás todo", fue otra de las frases reveladoras de la escucha.

Además, la funcionaria judicial afirmó que fue la propia mujer de Burela quien “facilitó la entrada del asesino, quien actuó de forma cobarde ya que le pegó dos tiros de frente y luego le puso el arma en el medio de la cabeza, saliendo el tiro de arriba hacia abajo”.  En su exposición, la fiscal Ríos insistió en que el asesinato del médico en el barrio Kolton fue “totalmente armado”. 

Por último y para sorpresa de muchos, la representante del Ministerio Público expuso como prueba una bolsa de residuos que Mónica Castro dejó en su celda del penal Agua de las Avispas y la cual contenía un pote con miel donde estaban escritos, en pequeños papeles, los nombres de los abogados defensores, del juez Martínez y hasta el de la propia Claudia Ríos. 

Más allá de la continuidad de la prisión preventiva, la fiscal también pidió que tanto Ventura como Castro sean embargadas por un millón de pesos cada una, situación a la que se opuso la defensa de la primera mujer por considerar que “no existen fundamentos legales para pedirla”

Alegato de la defensa

Cristian Leyton, uno de los abogados de Elizabeth Ventura, argumentó que para ellos no se trata de homicidio agravado por el vínculo sino de “un crimen en ocasión de robo”.

En su exposición, el letrado reconoció que en los meses que llevan de investigación el Ministerio Público no ha podido probar que fue un crimen pactado, o sea que hubo un sicario. 

“Se busca a un NN por un homicidio criminis causa, según una compulsa que hizo la propia fiscal, por lo que no entendemos porque se dice que fue un homicidio agravado por el vínculo. Hay fuertes indicios que la muerte fue en situación de robo, es más la familia sufrió dos violentos asaltos en su casa por lo que existen antecedentes al respecto”, explicó.

Por otro lado, Leyton sostuvo ante el juez que el día del hecho, 15 de abril, Ventura “hizo todas sus actividades rutinarias y no hizo nada extraño”.  

Además, uno de los defensores de la mujer pidió la "nulidad" del audio que la fiscal hizo escuchar en la audiencia.
 

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