La 7.722 es un emblema de la protección del agua y el ambiente

Nuestro presente está en grave peligro y también el futuro de nuestros hijos, si es modificada la Ley provincial 7722, que prohíbe la minería contaminante a cielo abierto y resguarda la pureza del agua y el medio ambiente. La norma es un ejemplo en el país y en el mundo a tal punto que fue ratificada por la Suprema Corte de Mendoza el año pasado.

Cambiar la Ley 7722, es permitir que los ríos puedan contaminarse y que tanto el agua que tomamos como la que usamos para los cultivos sean alcanzadas por derrames de cianuro, mercurio y otras sustancias químicas que se usan para la extracción de metales y cuyo  uso hoy está estrictamente vedado.

El riesgo incluso alcanza a las aguas subterráneas, reservorio alternativo  para subsistir cuando el deshielo no escurre el agua suficiente a nuestros ríos.

Los derrames contaminantes y reiterados en Jáchal, San Juan, son una muestra real de lo que nos espera si abrimos el camino hacia este tipo de minería.   

Desde Protectora Fuerza Política manifestamos una vez más nuestra posición terminantemente en contra de los cambios que promueven para cambiar la ley que protege el agua y prohíbe la minería contaminante.

Nuestros bloques legislativos rechazarán cualquier modificación que se proponga en la Casa de las Leyes convencidos de que el agua de Mendoza no se negocia.

Desde que nació la ley 7722, Mendoza ha podido proteger sus recursos hídricos en forma constante y transparente ante cualquier actividad minera que pudiese dejar secuelas imborrables para las generaciones futuras, tanto en contaminación ambiental, como en el uso indiscriminado de nuestro recurso más valioso, el agua.