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¿Por qué tengo los pies fríos todo el tiempo? Estos signos son los que hay que tener en cuenta

Los pies son unas de la extremidades más sensibles que tenemos las personas y en invierno o con los marcados cambios de temperatura, podemos sentir que estas partes del cuerpo están frías todo el tiempo y que nada las hace entrar en calor. Estos son las señales que tenés que conocer

Por Redacción

04 de diciembre, 2019 - 09:49

Las mujeres suelen tener los pies fríos con más frecuencia que los hombres. Aunque la mayoría de las veces no tiene importancia, sobre todo si sucede en invierno, si perdura en el tiempo puede ser síntoma de algún problema de salud.

Conocé cuáles son las enfermedades que pueden esconderse detrás de esto:

Mala circulación

Los pies son las extremidades más alejadas del corazón, por eso la sangre tiene más dificultad para llegar a ellos. Esto influye en que tengan una temperatura inferior a la del resto del cuerpo.

Si además existe algún problema que obstaculiza la correcta circulación sanguínea, la sensación se puede acentuar y provocar también otros síntomas.

Anemia

Un déficit de hierro puede afectar a la regulación de la temperatura.

Arteropatía periférica

La acumulación de placa provoca un estrechamiento y endurecimiento de las arterias, lo que a su vez causa una disminución del flujo sanguíneo en piernas y pies.

Las personas que tienen niveles altos de colesterol, hipertensión, alguna cardiopatía, diabetes o son fumadoras, tienen más riesgo de sufrir arteriopatía periférica (o enfermedad arterial periférica).

Los síntomas más habituales de este trastorno son:

  • - Pies y piernas fríos al tacto
  • - Piel pálida en estas extremidades
  • - Dolor, fatiga, ardor o molestias musculares en pies, pantorrillas o muslos

Al principio, aparecen al caminar (sobre todo, cuesta arriba o a paso rápido) o al hacer ejercicio. Pero si se agrava, estos síntomas pueden aparecer también estando en reposo, junto con entumecimiento, calambres, hormigueo o dolor en los pies y en sus dedos.

Enfermedad de Raynaud

Es un trastorno de los vasos sanguíneos que afecta a los dedos de las manos y los pies. Se genera una reacción excesiva al frío y al estrés emocional: los vasos se estrechan momentáneamente y no llega suficiente sangre a estas partes del cuerpo.

Cuando esto sucede, la piel de estas zonas se vuelve blanca o azulada, y los dedos se sienten fríos y entumecidos. Esto puede durar desde 10-15 minutos hasta más de una hora. Pero cuando el flujo sanguíneo se restablece, la piel se enrojece y se pueden sentir palpitaciones, hormigueo o dolor.

Aunque no se sabe la causa de este trastorno, en algunos casos está asociado a enfermedades como lupus, artritis reumatoide, fibromialgia o esclerodermia.

Trastorno neurológico

Si los sentís fríos, pero al tocarlos están calientes, podría ser una señal de neuropatía periférica. Este trastorno de origen neurológico suele ser bastante frecuente entre las personas que sufren diabetes.

Tener niveles altos de azúcar en sangre durante un largo periodo puede dañar los nervios periféricos, que envían información del cerebro y la médula espinal al resto del cuerpo.

En algunos casos, la neuropatía es hereditaria, y en otros puede deberse a un déficit de vitaminas del grupo B (B6, B9 o ácido fólico y B12), trastornos autoinmunes, intoxicaciones por metales pesados como el plomo, lesiones que causen una presión en un nervio o un consumo excesivo de alcohol.

Otros síntomas muy habituales de la neuropatía periférica son:

Hormigueo, falta de sensibilidad y dolor punzante en los pies (aunque también puede afectar a las manos y otras partes del cuerpo). O en lugar de frío, también puede notarse todo lo contrario: sensación de ardor en los pies.

Hipotiroidismo

La intolerancia o gran sensibilidad al frío es uno de los síntomas habituales. Este trastorno se da cuando la glándula tiroides tiene una actividad reducida y, por lo tanto, no produce la cantidad necesaria de hormonas tiroideas, fundamentales para la mayoría de las funciones metabólicas del organismo.

Además de la sensación de frío, el hipotiroidismo también puede causar:

  • - Cansancio, fatiga, somnolencia y apatía
  • - Dificultad para concentrarse, pérdida de memoria o depresión
  • - Aumento de peso
  • - Palidez, piel seca y fragilidad de uñas y cabello
  • - Estreñimiento
  • - Disminución del ritmo cardíaco
  • - Dolor en las articulaciones

Cómo combatir los pies fríos

En cuanto a la dieta, es bueno incluir alimentos ricos en magnesio, calcio, vitaminas E, K y C y productos picantes como la cayena, curry, canela, pimienta pueden aumentar la frecuencia cardíaca de forma que fluya más sangre a los pies. Evitar los lácteos, ya que aumentan la sensación de frío, y la cafeína porque comprime los vasos sanguíneos.

Beber agua regularmente porque la deshidratación puede enfriar los pies. Podés practicar hidroterapia y remojar los pies con agua tibia o realizar baños de contraste con agua fría y luego caliente porque activan la circulación del pie. También podés frotarlos con cualquier crema hidratante para que se calienten y ayuden a mejorar la circulación.

Cómo prevenir la sensación de frío

  • - Evita usar ropa demasiado ajustada, ya que dificulta la circulación sanguínea
  • - Usa medias de fibras naturales, como lana o algodón, y que no aprieten. El calzado también debe ser transpirable, para evitar que la acumulación de sudor enfríe los pies.
  • - No uses zapatos de taco alto a diario. Lo ideal es que tengan 3-4 cm de taco.
  • - No cruces las piernas mientras estés sentada.
  • - Hacé ejercicio moderado con regularidad, ya que favorece el riego sanguíneo en las extremidades y la oxigenación.
  • - Fumar aumenta los problemas circulatorios y el enfriamiento de las extremidades.
  • - Para calentarte los pies, no los pongas cerca de la estufa o el radiador, ya que esto favorece la aparición de sabañones. Mejor masajéalos para reactivar la circulación.
  • - Consumir alcohol para entrar en calor no es una buena idea. Aunque puede producir este efecto en el resto del cuerpo momentáneamente, provoca una vasoconstricción (contracción de los vasos sanguíneos) y dificulta la circulación en las extremidades, aumentando la sensación de frío en ellas.

Fuente: La bioguía