|11/04/19 10:00 AM

Historia del Skate en Mendoza

La influencia de los hermanos Honorato en un deporte que suma miles de adeptos en la provincia de Mendoza

17 de diciembre, 2019 - 19:32

Si existe una persona autorizada para hablar de la historia del skate en Mendoza, es Juan Pablo Honorato. “El Viejo”, como le dicen sus amigos, es dueño junto con su hermano Lucas de la marca Smt, quien lleva más de 30 años patinando.

Si bien, cuando comenzó por la década del 80 ya habían skaters realizando trucos en las calles de nuestra provincia, hoy por hoy no se encuentra en Mendoza un referente con mayor trayectoria que comprende,además, al arte de patinar como un estilo de vida.

Juan Pablo Honorato en su segunda casa, la vieja plaza San Martín

Su relación con el skate comienza en el verano del año 1988, en aquella época los sitios donde practicar este deporte eran pocos: la plaza Sarmiento y la plaza Chile. Los más adultos y con más nivel se juntaban en plaza Chile, ya que cerca de ahí, en la esquina de Las Heras y Perú; se encontraba la primera tienda donde vendían artículos de skate, llamada Loon, atendida por Diego Eynard. El era uno de los responsables de la construcción del half-pipe (o “U” como se le dice comúnmente) ubicada en la Costanera y a su vez, se encargaba de organizar campeonatos,que servían para motivar a nuevos amantes de la disciplina.

En estos años era una misión casi imposible conseguir accesorios y productos (tablas, trucks, ruedas y rulemanes) relacionados con la actividad. Lo que llegaba a Buenos Aires tardaba y mucho en arribar al interior del país -si es que finalmente podíamos verlo por estos lares- por lo tanto la vida del skate se sostenía en gran parte por la existencia de un sola tienda o skateshop. Sólo algunos elegidos tenían la oportunidad de viajar y traer productos que despertaban la admiración, la curiosidad y hasta envidia de los patinadores locales.

Tablas de skate.

Luego de la tienda Loon surge Meditarranee en la galería Independencia, que al cerrar produjo un cierto impasse en el deporte ya que no quedó ningún comercio donde adquirir nuevos productos. Para los mendocinos, la única alternativa era viajar o lograr que alguien te vendiera lo que habían conseguido fuera de la provincia.

A mediados y fines de los 90, nacen nuevas tiendas como Mao en la galería Piazza y Kranium (9 de julio 1023) después llegó a Mendoza, Cristobal Colón (Mendoza Plaza Shopping), que junto con otras pequeñas tiendas le dieron un renacer a la disciplina.

Surgieron muchos skaters en diferentes puntos de la provincias que se nuclearon en la mítica Plaza San Martín. No fue casualidad, su diseño parecía desarrollado por un skater; escaleras de todos los tamaños para realizar los más variados trucos, barandas y algunos bordes para deslizar.

Otro gran punto a favor es su ubicación en pleno centro, lo que hacía fácil el encuentro de todos los patinadores mendocinos. La plaza San Martín se convirtió en el emblema del skate local, ofició como una suerte de "Skatepark gigante", llegó a ser conocida tanto en todo el país, e inclusive internacionalmente.

50-50 se llama el truco realizado en una de las barandas de la antigua plaza San Martín

Luego de su reciente remodelación, hoy se encuentra estrictamente prohibido patinar ahí. Sólo queda el recuerdo en los nostalgiosos corazones de todos los skaters que tuvieron la suerte de compartir grandes días y forjar amistades para toda la vida, hasta incluso conocer allí algún amor, en la que fue, sin dudas, la mejor plaza para patinar.

Comenzada la renombrada crisis del 2001, adquirir nuevos productos se tornó casi imposible, lo que le dio origen a los queridas “Guatamba”. Son tablas nacionales de madera de Guatambú, más pesadas que las tablas importadas y mucho más accesibles económicamente, el ingenio argentino en épocas de crisis puesto al servicio del arte de patinar. El Guatamba se resistió en desaparecer y aún se sigue fabricando. Muchas de estas tablas comenzaron a ser traídas por Juan Pablo desde Buenos Aires y se agotaban rápidamente. Esto motivó que en el año 2002 creara junto a su hermano la marca Smt, en homenaje a la plaza San Martín y salen al mercado las tablas con la marca local y otros productos e indumentaria.

Tablas guatambu producidas por Smt

 A fines 2004 abre sus puertas el primer local exclusivo “Smt”, ubicado en la galería Independencia. La tienda fue creciendo rápidamente hasta ocupar el local más importante del espacio comercial. Además surge el team SMT, que incluía un corredor chileno

Es en ese momento se comienzan a filmar, sacar fotos y a dar a conocer en diferentes medios nacionales y latinoamericanos la relevancia de la escena local que hizo que arribaran muchísimos skaters de diferentes partes del país y del mundo. Con la llegada de corredores de importantes equipos de marcas extranjeras, Mendoza pasó a ser noticia en importantes medios especializados internacionales.

Barcelona está considerada como la mejor ciudad del mundo para patinar, aglutina skaters de todo el mundo porque su arquitectura es de lo más propicia para el deporte. Mendoza, fue bautizada como la Barcelona de Sudamérica, por la cantidad de lugares increíbles que se encuentran para patinar, al mismo tiempo e irónicamente era una de las pocas provincias del país sin Skatepark (pista de skate).

El Viejo ha hecho del skateshop una suerte de Casa del Skate donde los patinadores no sólo encuentran variedad de marcas y accesorios, sino también el asesoramiento del especialista con más años en ejercicio de la región. Charlas interminables que se funden en el sillón que posee el lugar, donde siempre un video acompaña la jornada. 

Juan Pablo y Lucas Honorato en plana sesión de video.

Llegado el 2010, con el apoyo de AASK (Asociación Argentina de Skate), Lucas Honorato comienza a gestionar lo que sería el primer skatepark de Mendoza, ubicado en el Parque San Vicente de Godoy Cruz. La pista fue inaugurada por el entonces intendente de Godoy Cruz y actual gobernador Alfredo Cornejo, como la primera pista pública de Cuyo, el acto se realizó con la obra a la mitad, porque el presupuesto aprobado se fue desvaneciendo con la inflación. Durante el 2018 se logró concluir la totalidad de la obra, con baños y buena iluminación.

Muchos padres encontraron en estos parques un lugar agradable donde compartir con sus hijos, dejando de lado un prejuicio inexplicable que corría alrededor del esta disciplina. Los amantes de las tablas eran mirados con recelo y desconfianza, algo muy raro en un deporte que ya es olímpico.

Se construyeron nuevas pistas en localidades como Rivadavia, Junín, Tunuyán, General Alvear, Maipú y San Rafael. Hasta que finalmente le llegó el turno a la Ciudad de Mendoza. Pronto se inaugurará el tan ansiado skatepark del nuevo parque O´Higgins de la Ciudad de Mendoza.

Tan grande como las ilusiones de cientos skaters mendocinos.Lo bueno siempre se hace esperar, afortunadamente esta pista vino para quedarse y a cumplir un sueño que con el correr de los años se veía cada vez más inalcanzable.

El skatepark de Rivadavia

El Ciudadano te ofrecerá una serie de notas donde podrás encontrar la historia del skateboard en Argentina, los elementos del skate, entrevistas a los destacados rider´s de la provincia, los skateparks de Mendoza y mucho más de esta apasionante deporte, que llegó a ser olímpico (con todo lo que eso significa) y que sin dudas comprende un estilo de vida. 

 

Investigación: Germán Gassull

Edición y corrección: Gabriel Landart