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PELIGRO DE MUERTE | Más de la mitad de los mendocinos adultos se automedica

Un estudio local confirma que lo hacen con medicamentos de venta libre. Por lo general se busca atrasar la consulta médica y encontrar una rápida cura. La visión de dos profesionales médicos sobre esta problemática que, a nivel nacional, produce en promedio 26 muertes al día

Por Redacción

10 de febrero, 2019 - 17:09

Seis de cada diez argentinos se automedican, una situación que representa un gran peligro dado los índices de mortalidad por sobredosis o los efectos colaterales.

Así lo indica un informe, y refiriéndose a esta realidad, el toxicólogo mendocino Sergio Saracco señaló que el fenómeno se incrementa día a día en nuestra provincia. 

“Es así y está relacionado a la coyuntura social de buscar soluciones rápidas. Esto va acompañado de intereses comerciales, donde se hace ver como si fuera una solución rápida a un problema, pero los medicamentos de venta libre tratan de enmascarar pero no llegan a una solución”, explica Saracco.

Lo cierto es que este fenómeno  hace que muchas veces se complique la patología de base, sin mencionar los efectos secundarios que tienen muchos medicamentos. 

“Con la necesidad de sacar un dolor para continuar con el día a día se busca una solución mágica y rápida con este medicamento que solamente saca el síntoma. Recordemos que el dolor, fiebre u otro signo de alarma es una luz roja que se enciende en nuestro panel. Cuando me automedico saco ese foquito de alarma para seguir funcionando, lo que no se hace con un vehículo o un avión”, indicó el exministro de Salud de la provincia. 

Y agregó que “lo que hay que hacer es consultar en forma inmediata a un profesional médico para saber por qué tengo este dolor o fiebre. Tengo que ser evaluado o estudiado para que me den un tratamiento que cubre esa afectación que puede ser farmacológico o quirúrgico”. 

Otro tema alarmante es que un porcentaje importante de medicamentos son comprados en un lugar no autorizado, como quioscos o minimarkets, entre otros.

Pero lo que se debe tener en cuenta es que la farmacia es el único lugar que nos da la garantía de calidad, ya que posee condiciones de guarda bajo control estatal. 

“Muchas de estas compras se hacen en forma ilícita en lugares no autorizados, que no son farmacias. Tenemos que tener la conciencia de compra y después hacer un uso racional. Cuando estas sustancias son indicadas para una patología precisa en dosis adecuadas, vamos a tener beneficios superadores. Hay que leer el prospecto, ya que nos vamos a sorprender sobre las acciones que tiene eso que nos estamos automedicando. Lo otro es consultar siempre al profesional que va a dar lo mejor para el paciente”, explicó Saracco.

Los medicamentos más consumidos

Por otra parte, un trabajo de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE) y la consultora Voices! concluyó que alrededor de la mitad de los argentinos que consumieron remedios en el último año se automedica y que los más consumidos, son los analgésicos y antiinflamatorios.

En ese sentido, Andrés Cuesta, secretario académico de la UADE, destacó en una nota que “constituye un verdadero problema de salud pública la automedicación y es especialmente preocupante la práctica extendida de consumo de antibióticos sin prescripción médica por parte del 26% de quienes han recurrido a este tipo de medicamentos recientemente".

Como señala la Organización Mundial de la Salud (OMS), el uso indebido e innecesario de antibióticos –tanto en seres humanos como en animales– es una amenaza para la salud pública que está generando una aceleración de la resistencia a los antibióticos y dificultando el tratamiento de numerosas infecciones, prolongando las estancias hospitalarias, incrementando los costos médicos y aumentando la mortalidad".

En la publicación se indica que el 59% de los ciudadanos consumió analgésicos o antiinflamatorios en el último año, mientras que un 40% lo hizo en el último mes.

El segundo lugar lo ocupan los antibióticos, consumidos por el 43% de los argentinos en el último año y por dos de cada diez en el último mes.

Los antigripales figuran en tercer lugar, con un 35% de habitantes que los tomó en el último año y un 15% que los utilizó en los últimos 30 días.

Al observar los medicamentos que registran el menor consumo en el año y en el mes, pastillas para dormir, tranquilizantes, ansiolíticos y antidepresivos presentan un uso personal que oscila entre el 7% y 3% para el último año y entre 4% y 2% para los últimos 30 días.

Los laxantes por su parte figuran últimos en consumo con solamente un 2% en el último año y 1% en el último mes.

Según la publicación, los tranquilizantes, las pastillas para dormir y los ansiolíticos presentan un mayor uso entre los argentinos mayores a 50 años (12%, 9% y 5%, respectivamente), al igual que los medicamentos para la hipertensión arterial y para el colesterol (33% y 18%).

La fuente de recomendación de los medicamentos varía según el tipo de droga en cuestión: así, los medicamentos relacionados con el sistema nervioso –que son los de menor consumo– y aquellos destinados a combatir patologías específicas como la hipertensión o el colesterol son principalmente recomendados por un médico.

El 99% de los argentinos que consume medicamentos para el colesterol declara consumirlos por recomendación médica.

En el caso de los antidepresivos, el 98% de los ciudadanos los toma por indicación de un profesional de la salud.

Mientras, las drogas para la hipertensión son prescriptas por médicos en el 97% de los casos y el 91% de los argentinos que consumen tranquilizantes lo hacen bajo receta médica.

En el caso de los ansiolíticos, medicamento recetado por médicos en un 86% de quienes lo consumen, pero el 10% del consumo proviene de la recomendación de un amigo.

Las pastillas para dormir, por su parte, son prescriptas principalmente por médicos (85%) y en este caso, el rol del farmacéutico crece en comparación a los medicamentos antedichos: el 7% de los ciudadanos declara consumirlas por sugerencia de este profesional.

Recomendación profesional

La situación difiere en el caso de los medicamentos de mayor consumo en la población general, ya que son estos los que presentan la menor tasa de recomendación médica.

En el caso de los antibióticos, el 74% del consumo viene por indicación de un profesional de la salud, un 16% declara que los consume por el hecho de hacerlo siempre y el 6% dice utilizarlo por consejo del farmacéutico.

En línea con lo que sucede en el caso de antibióticos, los antialérgicos cuentan con un 73% de recomendación del médico, mientras que un 10% declara consumirlo siempre y un 9% de los argentinos dice utilizarlos mediante la sugerencia del farmacéutico.

Además, el 68% declara consumir anticonceptivos por prescripción médica, mientras que un 26% dice que los utiliza porque siempre lo hace.