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El Poder Judicial de Mendoza defiende lo hecho por el exministro Garavano

El discurso presidencial en la ceremonia de asunción cargó contra el Poder Judicial y despertó respuestas como la que compartimos, en respaldo de lo actuado

12 de diciembre, 2019 - 14:53

En su primer discurso como presidente de la Nación, Alberto Fernández fue muy duro con el Poder Judicial nacional. El flamante primer mandatario no dio muchas vueltas para calificar a la Justicia argentina como un poder deteriorado.

Para Fernández, ese estado ha mostrado “persecuciones indebidas y detenciones arbitrarias, inducidas por los gobernantes y silenciadas por cierta complacencia mediática”. Por ello, acto seguido, el presidente anunció que “impulsará la consagración de una integral reforma de la Justicia”. Por eso agregó: “Vengo a manifestar un contundente ‘nunca más’ a una Justicia contaminada por servicios de inteligencia, por operadores judiciales, por procedimientos oscuros y linchamientos mediáticos”

Las expresiones presidenciales sonaron para muchos sectores como un paraguas protector a su vicepresidenta Cristina Fernández procesada y enjuiciada por hechos de corrupción durante su gobierno.

Como así otros altos funcionarios, dirigentes gremiales y empresarios ligados a ese gobierno, la mayoría detenidos y con procesos penales con pruebas documentales, testigos encubiertos y escuchas telefónicas.

Ante esto, El Ciudadano tuvo contacto con el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la provincia, Jorge Nanclares, quien como todos vio y escuchó el discurso presidencial y tomó nota de esa fracción de los dichos de Alberto Fernández. Accedió a hablar, aclarando que colocaría el acento en todas las innovaciones que hizo en material judicial la administración que culminó su mandato.

Para el titular de la Corte, “hay que distinguir dos cosas, lo que significa la Justicia nacional con Comodoro Py, por un lado. Por otro, lo que implicó una verdadera transformación de todas las justicias provinciales, donde realmente de la dirección política del exministro Germán Garavano se hicieron importantes modificaciones. Resalto, la instalación de la oralidad en casi todas las provincias, donde en muchas provincias, como Mendoza, se puso en marcha el juicio por jurados”. 

“Una cosa es lo nacional, con lo que implica Comodoro Py, y lo otro son las transformaciones de las justicias provinciales, aspecto que me gustaría mucho que sea tenido en cuenta en Buenos Aires, para que se continúe como política de Estado con los lineamientos que imprimen las justicias provinciales, con lineamientos que bien pueden influir en la Justicia nacional”.

Parentesco entre corrupción y política en órbita de jueces nacionales

Cuando se le preguntó cómo incide en la gente el mensaje presidencial sobre la actuación de la Justicia en quienes están sindicados en producir corrupción, dijo: “Hay que esperar los distintos pronunciamientos y las decisiones que se tomen a partir del nuevo Gobierno, por eso marco perfectamente la diferencia entre los aspectos políticos. Es obvio que existe mucho parentesco entre la corrupción y la política y entran en un campo de decisiones de los jueces nacionales. Prefiero no emitir opinión”.

Y destacó: “Si tuviera la oportunidad de hablar con la nueva ministra de Justicia de la Nación, Marcela Losardo, le diría que continúen con planes y planificaciones que se hicieron durante la gestión de quien fuera ministro Germán Garavano”.

Finalmente se le consultó lo hecho en materia judicial en Mendoza,  a lo que respondió: “Las innovaciones judiciales fueron muy buenas, algo que aquí en Mendoza el exgobernador Alfredo Cornejo las tomó y esto le permitió a la Justicia provincial estar a la vanguardia, por eso –si Dios quiere– el próximo año tendremos en la provincia el expediente digital, punto que integra un todo, que nos hace cuidar y fortalecer todas las reformas que hemos hecho tanto en la Justicia civil, como en la penal”.