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Con movilizaciones y comunicados, distintos sectores se oponen a modificar la Ley 7.722

Desde grupos ambientalistas hasta eclesiásticos se han manifestado frente al tratamiento de posibles reformas a la norma que regula el uso del agua e impide algunas prácticas mineras. También se sumaron al rechazo la Pastoral Social de la iglesia provincial y la Federación Agraria Argentina

19 de noviembre, 2019 - 16:55

Luego de los pedidos y aparentes consensos para comenzar a tratar reformas a la Ley 7.722, distintas organizaciones comenzaron a movilizarse y a expresar por distintos medios su oposición a dichas medidas.

La reforma, que permitiría comenzar con ciertas explotaciones mineras hoy restringidas por la norma, aceptando la utilización de algunas sustancias hoy prohibidas en la minería metalúrgica, estuvo en carpeta de casi todas las fuerzas políticas, especialmente en las dos mayoritarias, como modo prometido de ampliar la matriz productiva de la provincia y mejorar el empleo.

El lunes comenzaron las marchas, con el ruidazo en la Plaza Independencia convocado, entre otros, por la Asamblea Popular por el Agua de Mendoza. Tuvieron lugar en Capital, Tupungato, San Carlos, General Alvear, San Rafael, Junín, Las Heras y Tunuyán.

El comunicado de la Asamblea reza textualmente: “Urgente Mendoza!!! Es momento de dejar la indiferencia! Nos toca movilizarnos!!!!. Vos, el agua que tomás, tus montañas y ríos están en peligro!!! Quieren voltear la 7.722, la ley madre en defensa del agua que regula y prohíbe sustancias hidrotóxicas en la megaminería”.

En la convocatoria, expresan: “Este lunes a las 20 es vital para la defensa de Mendoza que te sumés en la Plaza Independencia y más importante aún el martes a las 9 de la mañana en la Legislatura cuando los senadores traten el proyecto de modificación”, y agregaron: “Suarez, Cornejo y senadores de la oposición como Abraham y Agulles quieren modificar la ley para que no cumpla su rol de protección del agua dulce de la provincia. De todos nosotros depende, apuntan al desgaste, a empobrecernos más, a contaminar el agua y privatizarla en un futuro como el modelo de Piñera. Pero en tu sangre corre agua pura que proviene de los ríos de mendoza, no es cianuro no es xantato ni tampoco mercurio de la megaminería. Es momento de movilizarnos!!!!! todos contamos con vos!!!”.

La posición de la federación agraria

Pero no fueron los únicos, ya que desde la Federación Agraria Argentina en su cúpula nacional, liderada por el mendocino Carlos Achetoni, se hizo saber también la oposición a través de un comunicado, que dirigieron a sus filiales, centros juveniles y de mujeres, y a las entidades afiliadas de Mendoza, donde se manifiestan en apoyo a las acciones que se llevarán a cabo en defensa de la Ley 7.722 “que tiene como finalidad fundamental preservar el recurso hídrico de cualquier actividad minera que en su proceso desarrolle métodos de carácter altamente contaminantes”.

La posición es muy compartida en los departamentos del sur de la provincia por sectores del agro, especialmente en San Rafael, General Alvear y San Carlos.

Pueblada y cacerolazo en la plaza de General Alvear, en Defensa del Agua.

La posición de la Iglesia mendocina

El rechazo a la reforma también aparece en un comunicado que emitió la Pastoral Social de Mendoza. Bajo el título: “¿Qué Mendoza queremos dejarle a nuestros hijos?”, el comunicado señala: “En estos días, luego de la aprobación exploratoria de Hierro Indio, se da por descontado en los medios de comunicación la derogación o modificación de nuestra Ley 7.722. Esta breve ley de seis artículos no es antiminera. Es una ley que exige determinados recaudos necesarios a tomar para autorizar la explotación minera en la provincia. La construcción de esta ley es fruto de un proceso social admirable que merece ser respetado”.

También considera: “Atravesamos una vez más un año de sequía fruto del cambio climático que nos afecta a todos. Y lo sentimos todos: la ganadería, la agricultura y la vida de los oasis poblados en la provincia. Cuidar el agua es una responsabilidad de todos. Así nos lo pide incluso la publicidad estatal”. La ley 7.722 ha sido históricamente una herramienta de protección de este bien escaso e imprescindible, ya que “cuando hablamos del agua tenemos que saber que nosotros somos el agua, el aire la tierra”. 

El artículo 1 expresamente expone la tutela del recurso hídrico como una finalidad de esta ley y por eso limita el uso de sustancias tóxicas que lo contaminan.

El artículo 3 garantiza la necesidad de la licencia social, elemento indispensable para cualquier acción que pueda conllevar la pérdida de un bien escaso. Por eso exige la ratificación por ley de la declaración de impacto ambiental después de escuchar a todas las voces que alcancen el siempre delicado y necesario consenso social. “Así, la Ley 7.722 confirma nuestra mejor tradición institucional, requiriendo la ratificación legislativa para estos proyectos. Trabajamos por el diálogo y el debate que nos ayuden a superar las dificultades sociales y económicas que afectan la provincia y el país. El contexto y el horizonte lo constituye el pleno respeto de una ecología integral. En ese sentido, tenemos que ser conscientes de que las decisiones que hoy tomemos impactarán no solo en el presente, sino de cara a las generaciones futuras. Pedimos especialmente a los legisladores que asuman plenamente y ante la ciudadanía esta responsabilidad que va más allá de la coyuntura política”.

“Ya no basta decir que debemos preocuparnos por las futuras generaciones. Se requiere advertir que lo que está en juego es nuestra propia dignidad. Somos nosotros los primeros interesados en dejar un planeta habitable para la humanidad que nos sucederá. Es un drama para nosotros mismos, porque esto pone en crisis el sentido del propio paso por esta tierra”. (Papa Francisco, Laudato sí, 160).