Fauna mendocina: modifican normas para protegerla

La matanza de animales suele ser una práctica muy frecuente en diferentes puntos del país. Particularmente en Mendoza, existen zonas estratégicas donde los cazadores furtivos despliegan sus armas y cazan a sus presas, en la mayoría de los casos, animales en extinción.

En la provincia existieron algunos cotos de caza, es decir, áreas permitidas para realizar la caza deportiva, lo cual ha generado cierta polémica tanto en la sociedad en general como en los proteccionistas de animales.

Siempre se busca preservar tanto a la fauna como a la flora de un lugar y este tipo de actividades, para muchos recreativa, atenta contra la preservación de las especies.

Esta semana, la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial de la Provincia dictó una resolución que amplía la normativa vigente y autoriza la caza de animales considerados “exóticos invasores”, como ciervo colorado, chancho jabalí, liebre europea y conejos silvestres.

La argumentación del organismo estatal está basada en que las especies mencionadas dañan el medio ambiente y atentan contra los productores ganaderos y agrícolas.

Uno de los párrafos de la Resolución 1.307, sancionada el 10 del mes en curso, indica que “se considera a la actividad cinegética (caza deportiva) una actividad permitida  siempre que sea realizada de manera sustentable, respetando especies, cupos y temporadas, con el correspondiente permiso de caza, con permiso del dueño del campo y en los sitios permitidos”.

Por otro lado, se establece que “conforme a lo establecido en el artículo 7º del Decreto Reglamentario Nº 1.890/05, la Dirección de Recursos Naturales Renovables fijará zonas y períodos de caza y veda debiendo establecer un calendario anual de veda y temporada de caza para las especies permitidas, el que se dará a conocer anualmente con suficiente anticipación”.

Ya en la parte donde se resuelve, la normativa expone en su artículo 1 que “se autoriza la actividad cinegética de especies consideradas exóticas invasoras, dañinas y perjudiciales en las cantidades que a continuación se detallan: ciervo colorado (cervus elaphus), chancho jabalí (sus scroffa), liebre europea (lepus europaeus) y conejos silvestre (oryctolagus cunículus)”.

Otro punto importante en esta normativa de la Secretaría de Ambiente sostiene que los cazadores no pueden desguazar a sus presas.

“Se prohíbe el transporte de ejemplares en forma trozada, es decir, en cortes pequeños, que dificulten o directamente impidan ejercer un adecuado control de las especies capturadas y cupos autorizados”, establece el artículo 2.

La oposición a la resolución

Oscar Mellado, uno de los abogados especializados en la defensa de los animales, dialogó con El Ciudadano y mostró su disconformidad con esta resolución que autoriza la caza de los animales especificados.

“Nosotros estamos en contra de todo lo que sea cacería, no puede ser que a esta altura de la evolución la solución sea eliminar las especies. Más allá de que se las califique como exóticas o depredadoras, para nosotros siempre hay que salvaguardar la vida, y en este caso se ve vulnerado el derecho de los animales”, explicó el letrado.

Mellado reconoció que al defender a los animales se los tilda de “fanáticos”. “Si existen perjuicio o daños a los productores, provocados por el animal o especie que sea, nosotros hemos propuesto soluciones alternativas y en el caso de los ciervos también quisimos sentarnos para hablar del tema”, agregó el abogado que integra la Comisión de Derecho Animal del Colegio de Abogados de Mendoza.

“¿Qué culpa tiene el animal para que sea eliminado? Nosotros hacemos un parangón con la famosa perrera acá en Mendoza, donde está la ley no eutanásica, porque durante cien años con este criterio se han eliminado a los perros y gatos (fauna urbana) bajo el razonamiento de no hay solución, hay que matar”, puntualizó Mellado.

Aclaran que no es coto

“Desde el 2001 en Mendoza se trabaja con la actividad cinegética y siempre se planteó el control de las especies exóticas invasoras. Lo que se hizo ahora es ampliar el rango y que estos animales puedan cazarse, además de cotos, en campos privados donde sus dueños han denunciado la presencia de los mismos, muchos de ellos que han llegado por diferentes circunstancias”, explicó Adrián Gorrindo, jefe del Departamento de Fauna de la Dirección de Recursos Naturales de Mendoza. 

Por otro lado, la autorización de la caza de este tipo de animales calificados como invasores, además de generar polémica por la muerte de los animales, también abre un interrogante sobre el negocio que podría darse detrás de estas áreas para cazar.

“Esta resolución de caza es una herramienta de manejo y no se aplica a un negocio. Estamos actuando como Estado para preservar nuestra fauna silvestre que son los recursos naturales que estamos obligados a defender como autoridad de aplicación. La Provincia no lucra con este tipo de animales como sí lo hacen otras provincias; acá solo buscamos proteger la biodiversidad”, puntualizó Gorrindo.

Pesca ilegal de truchas

El fin de semana, guardaparques de la Dirección de Recursos Naturales Renovables de la Provincia informaron que secuestraron 90 truchas y elementos utilizados para la pesca ilegal.

Los patrullajes se realizaron en las inmediaciones del Arroyo Grande de la Quebrada con apoyo de efectivos de la Subcomisaría de Manzano Histórico, en Tunuyán.

El operativo se inició a partir del aporte de datos precisos de pobladores de la zona, que permitieron dar con cuatro individuos que pescaban de manera ilegal.

Los infractores fueron desinfectados y la pesca desnaturalizada (destruida), para evitar la contaminación, ya que este arroyo se encuentra vedado por presencia de el alga exótica invasora didymo o moco de roca.

Para mayor información sobre este caso pueden ingresar en www.ambiente.mendoza.gov.ar.