Mendoza: llueven denuncias por acoso, pero sólo por redes sociales

Tras la conmoción que causó en la sociedad argentina el caso de abuso y violación del que habría sido protagonista el conocido actor Juan Darthés contra una actriz que cuando ocurrió el hecho tenía 16 años, entre el miércoles y ayer en Mendoza se conocieron otras denuncias sobre hechos de acoso en los que estarían comprometidos estudiantes mendocinos.

Sin embargo, todas fueron hechas a través de las redes sociales sin que ninguna haya recalado por ahora en la Justicia, lo que hace que sea muy difícil darles veracidad. 

Precisamente esta vía no es la más adecuada para este tipo de denuncias, a pesar de que de esta manera se pueden visibilizar los hechos ante la falta de acción de la Justicia con la suficiente celeridad.

De todos modos, en tres de los presuntos hechos ya intervinieron las autoridades de cada establecimiento involucrado para que se aplique la ley, si corresponde.

Uno de ellos da cuenta de un hecho en el colegio Compañía de María de Capital, un alumno habría abusado de una compañera cuando esta tenía 13 años, lo que la víctima dio a conocer el jueves a través de Twitter.

La lista del CUC

Se trata de la difusión de una lista de varios jóvenes que, según se denuncia, habrían acosado a algunas de sus compañeras del Colegio Universitario Central (CUC), dependiente de la Universidad Nacional de Cuyo, y las supuestas víctimas los escracharon a través de las redes sociales.

Tras la difusión de la lista, autoridades de la Casa de Altos Estudios salieron a dar explicaciones, y así se supo que en el Departamento de Actualización Docente y en la escuela del Magisterio, ambos dependientes de la UNCuyo, se habrían registrado casos de acoso. 

Al respecto, María Ana Barroso, directora de Educación Secundaria de la Universidad, explicó que si las denuncias se hacen en el colegio o en la facultad, se activa el protocolo correspondiente para abordar estos temas.

“De ninguna manera pensamos que esto se puede dejar pasar. Lo que sucede es que aquí hay un límite, que es muy delgado, muy fino, y es aquello que se denuncia en las redes sociales. Como es el caso que nos ocupa y aquellos que son denunciados en diferentes organismos”, expresó. 

Y agregó que también son considerados para analizar los casos denunciados en las redes sociales, por lo que “ninguno se deja de lado”.

“Muchas veces estas denuncias se hacen a través de la redes sociales (pero) la escuela de ninguna manera desoye esto, aunque la manera de actuar solo por las redes sociales tiene un límite para las instituciones educativas”, consideró.

“En algunos casos que los alumnos denuncian, se activa un protocolo y hay que hacer muchas veces derivaciones a instancias legales. Tenemos un caso concreto en uno de los colegios, con respecto a un alumno, y otro caso de un adulto. En ambas situaciones se trabajó con los estamentos legales”, aseguró.

“No estamos hablando de abuso sexual en forma particular. Sí de una situación que indudablemente es de abuso, pero tiene que ver más con la autoridad y no tanto con el tema de abuso vinculado al aspecto sexual”, consideró Barroso.

Conocente: “Denunciar sí, pero donde corresponde”

También el titular de la Dirección de Orientación y Apoyo Interdisciplinario a las Trayectorias Escolares, Miguel Conocente, habló de las denuncias que se vienen realizando por las redes sociales sobre abusos. al respecto, el funcionario dijo que “esto tiene un aspecto positivo y uno negativo”. 

“El positivo es que este tipo de casos es muy bueno que salgan a la luz, que no queden silenciados, porque a partir de que salen a la luz hay una posibilidad de empezar a operar para tomar cartas en el asunto. Lo negativo es que no es justamente la vía, (porque) las redes sociales visibilizan una realidad pero si no existe una denuncia concreta en los organismos correspondientes se dificulta la posibilidad de operar. Sí la denuncia se hace en la escuela, rápidamente la institución tiene herramientas para poder trabajar e intervenir estos casos”, explicó.

Y dio un ejemplo al explicar que “en Mendoza, desde hace unos meses con el decreto 1187, donde figuran las guías de procedimiento para situaciones emergentes estos casos están contemplados. Las escuelas saben cómo trabajar estas situaciones rápidamente”.

“A partir de este año, Mendoza tiene una ley, la 9054. Esta ley se dio a conocer públicamente como la Ley de Defensa del Docente, y un artículo habla de estos casos cuando los chicos son víctimas de abuso o de maltrato. Esta ley pone en juego un nuevo actor fuera del ámbito escolar que es el asesor de menores”, indicó el funcionario en una radio local.