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Argentina y la producción de hidrógeno 'verde': qué es y para qué sirve

La firma australiana Fortescue realizará una multimillonaria inversión en el país. El negocio estará vinculado a la producción de este 'el combustible del futuro'

Por Redacción

02 de noviembre, 2021 - 09:11

Este lunes y en el marco de la cumbre mundial COP26 que se realiza en Glasgow, se conoció el importante anuncio de inversión que realizará la famosa empresa australiana Fortescue.

 

Fortescue invertirá más US$ 7.000 millones para producir hidrógeno verde.

 

Fuentes oficiales destacaron que el proyecto tendrá una inversión inicial de $3 mil millones y va a generar 4.000 puestos de trabajo en la primera etapa.

La empresa australiana tiene como objetivo convertir a Río Negro en un polo mundial de hidrógeno verde en 2030, con capacidad de producción de 2.2 millones de toneladas anuales.

 

¿Qué es el Hidrógeno Verde y para qué se usa?

El hidrógeno verde es considerado como "el combustible del futuro" y es generado mediante electrólisis a partir de energías renovables como la solar y la eólica, en las que Argentina tiene un gran potencial para desarrollar proveedores competitivos y crear nuevos empleos.

 

El hidrógeno verde se produce a partir de agua y energías renovables.

 

La obtención por electrólisis a partir de fuentes renovables consiste en la descomposición de las moléculas de agua (H2O) en oxígeno (O2) e hidrógeno (H2).

El hidrógeno es el elemento químico más abundante del planeta y no es considerada una fuente energética en si misma, sino un vector energético, ya que almacena energías generadas por otras fuentes de manera tal que posteriormente pueda ser posteriormente liberada en sistemas ya conocidos.

 

El hidrógeno históricamente, se obtuvo usando combustible fósil.


La separación de hidrógeno se puede hacer con energía eléctrica o gas natural pero la forma más amigable con el medio ambiente es producirlo con energía solar y eólica.

 

Los países más industrializados y avanzados buscan reducir el costo de la electrólisis.

 

La molécula de H2 tiene alta densidad energética por unidad de masa; tres veces más que la gasolina y 120 veces más que las baterías de litio.

Según el Ministerio de Ambiente, "la tecnología del hidrógeno verde" suscita cada vez más interés "como una estrategia de transición energética. Implica una gran oportunidad para Argentina porque tiene una amplia ventaja competitiva para generar energía renovable".

En la actualidad, seis naciones lideran la investigación y el desarrollo de este tipo de energía renovable: Australia, Alemania, Países Bajos, China, Arabia Saudita y Chile.

Un informe del Banco Mundial señaló que la exportación de este combustible limpio desde América Latina es "una vía para la recuperación económica inclusiva, resiliente y verde".

Argentina, Brasil, México y Perú tienen gran potencial de demanda local por la minería y la producción de acero, hierro o químicos, indica Télam.

El hidrógeno verde es fundamental para descarbonizar la matriz productiva, con un impacto muy positivo para luchar contra el cambio climático.

El principal objetivo es reemplazar el combustible fósil, y el hidrógeno ver tiene gran potencial para descarbonizar el transporte pesado, por ejemplo: camiones, micros y buques. También se puede utilizar en distintas industrias que consumen mucha energía, tales como es la producción agrícola, de acero, cemento, papel y fertilizantes.

Se lo llama hidrógeno “verde” porque toda la energía que se utiliza para producirlo proviene de fuentes renovables, en este caso, la eólica.