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Tormentas en vendimia: semana clave para la cosecha de uvas

Los productores ya comenzaron su lucha contra enfermedades generadas por el exceso de agua en los viñedos.

28 de febrero, 2021 - 22:52

La vitivinicultura argentina, y especialmente la de Mendoza, se devane pensando en lo que sucederá durante los próximos días cuando los cosechadores deban ingresar nuevamente a los viñedos para una cosecha de uvas que viene con demasiadas sorpresas.

A los bajos stocks de la industria y con un pronóstico magro de recolección de los frutos de la vid ahora los viñateros, principalmente del Sur y el Este de Mendoza se encontraron con el problema del exceso de humedad producto de las intensas lluvias precipitadas en los últimos días.

Como consecuencia de ello ya se observan distintas producciones amenazadas por enfermedades como la peronóspora de la vid o la botrytis cinerea que en algunos casos no responden ante las curaciones tradicionales y se quedan en el camino ante la imposibilidad de utilizar tratamientos más caros como los sistémicos.

 

 

Más allá del granizo que siguió afectando en algunas localidades como de Santa Rosa o en Junín, pero en menor escala que en noviembre último, las intensas tormentas de agua no solamente impidieron que los cosechadores ingresaran a los viñedos sino que ahora el gran temor reside en la podredumbre de botrytis que se podría extender, diríamos, casi de forma de pandemia. Tal como está ocurriendo en un viñedo (foto) atacado por peronóspora en el Este de Mendoza.

 

 

“Estamos con una muy alta humedad y ante una situación de bajos stocks y con una cosecha baja tenemos que tener cuidado con esta situación y monitorearla. Más allá del granizo y de estos tipos de situaciones”, reflexionó un dirigente vitivinícola anoche, preocupado por los testimonios que ha venido recogiendo desde el jueves.

 

 

Principalmente los inconvenientes de la alta humedad se notaron en San Rafael siendo el departamento con más reportes de emergencias solicitados por los mismos actores de la industria. El departamento del Sur de Mendoza ha tenido una temporada dura frente a la contingencia además del granizo.

Luego la mirada se traslada hacia el Este, a los departamentos de Rivadavia, Junín y de San Martín. El primero es el más afectado hasta el momento en ese oasis productivo. 

 

 

Detrás de esos departamentos aparecen otros casos como en General Alvear, Malargüe, un poco en Tunuyán y en departamentos del Norte de Mendoza como en Lavalle.

Ya en algunos lugares la palabra desastre está quedando casi corta si se experimenta los que sintieron los productores de Ugarteche a quienes el agua les arrasó casi unas 10 hectáreas de viñedos, solamente por un efecto aluvional de bajada del agua de las últimas tormentas.

Por ello será indispensable seguir muy de cerca los próximos siete días de cosecha por los que ya se especula que a la merma de un 6 por ciento en la cosecha, respecto a lo que sucedió en 2020, se le podrían llegar a sumar unos 3 puntos más, con criterio optimista.

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