Pymes gastronómicas en peligro de extinción
La inactividad de hoteles, bares y confiterías impacta duramente en los establecimientos más vulnerables, afectando a los trabajadores. Acciones del gremio
Son locales que cuentan con no más de tres o cuatro empleados y que antes de la cuarentena su caja recaudadora funcionaba en el día a día. Muchas de ellas se reinventaron con urgencia para operar con clientela de manera domiciliaria mientras dure la cuarentena. Otros en cambio quedaron paralizadas, aparejadas con el resto del sector gastronómico y hotelero de la provincia.
Este segmento de la economía local y unos de los pilares fundamentales de la denominada industria del turismo, deberán continuar esperando a las próximas fases de la cuarentena, ya que por decisión presidencial todavía no pueden operar, toda una cuestión que agrava aún más la situación de quienes invirtieron ahí y de las importantes fuentes de trabajo. Sobre esto último hay que recordar que al inicio de la cuarentena se produjeron despidos masivos del personal eventual sin ningún tipo de indemnización. Quedaron afectados alrededor del 30% de trabajadores de hoteles de cuatro y cinco estrellas, que implica aproximadamente a 600 personas.
Sin lugar a dudas en Mendoza el sector hotelero y gastronómico es sumamente importante por las fuentes de trabajo creadas dentro del mismo y el aporte de ingresos a las finanzas de este Estado provincial. La crisis económica profundizada con la cuarentena que enfrenta la pandemia del COVID-9, ha colocado a este sector en uno de los momentos más duro. Por eso que la ayuda del Poder Ejecutivo nacional a través de la Asistencia de Emergencia al Trabajo ATP para pagar el 50% de los sueldos al sector y el acuerdo para reducir el salario de los empleados del sector en un 75%, bajo el argumento de mantener las fuentes de trabajo.
El 60 % de hoteles y casas de comidas recibieron ATP para sueldos
Para hablar de este sector que se siente postergado, y con razón, El Ciudadano entrevistó a la secretaria administrativa de la Unión de Trabajadores de Hotelería, Gastronomía y Turismo de la República Argentina (UTHGRA) Mendoza, Carolina Montivero. Al preguntarle sobre el panorama de quienes representa, respondió: “La situación del sector hotelero y gastronómico es muy crítica. El 80% de las empresas son pymes, es decir, bares y parrillas que viven de la caja que recauda en el día a día. A ese sector le será muy complicado volver a reiniciar su actividad. Creo que el Estado debería estar pensando en otorgarles créditos a tasa cero para que puedan reabrir sus puertas”.
Cuando nuestro diario la consultó sobre el aporte gremial, detalló: “Por el lado de la responsabilidad que tenemos como representantes gremiales de los trabajadores, pondremos nuestro apoyo a los empleadores para transmitir protocolos que hemos elaborado desde la central de UTHGRA. Se trata de una capacitación creada para que en un principio sea online para todos los municipios y para todos los establecimientos gastronómicos. La segunda fase será en el lugar, aunque esto último será muy adelante, porque consideramos que estamos muy lejos de una pronta recuperación”.
Sobre los apoyos previstos por el decreto presidencial de emergencia, dispuestos en plena cuarentena, hacia empresas, Montivero, dijo: “Tenemos la información que el 60% de las empresas gastronómicas y hoteleras recibieron la apoyatura del programa ATP dispuestas por el Gobierno Nacional. Le aclaro que dentro del 40% de las empresas que no recibieron esa ayuda, hay establecimientos que no se inscribieron en el programa”.
Al respecto de bajar salarios para mantener las fuentes de trabajo y ayudar a las empresas para que no cierren sus actividades, confesó: “Llegamos acuerdos. Lo hicimos con el fin de guardar las fuentes de trabajo y la continuidad laboral de las empresas, firmamos el acuerdo de emergencia por suspensión de actividades para el sostenimiento de los puestos de trabajo. Lo pactado tiene una prórroga de 60 días desde el 1 de abril hasta el 31 de mayo. En cuanto al monto acordado es del 75% del salario de los trabajadores del sector. Aclaro que esto es para el caso de empresas que están cerradas o las que tengan parcialmente abierto sus establecimientos”.