Mendoza en fase 5: distancia, deportes y reapertura comercial

A través del Decreto Nº 698 con fecha del 7/6/2020, el gobernador Rodolfo Suarez prorrogó por 24 horas más el Decreto 657/2020 y sus normas complementarias. De esta manera, en Mendoza, el aislamiento seguirá sin cambios respecto de las medidas que se están aplicando hasta ahora.

El motivo de la prórroga provincial es que hasta anoche no había sido publicada la norma nacional anunciada por el presidente Alberto Fernández el pasado jueves, en la cual indicó que el aislamiento preventivo social y obligatorio continuará hasta el próximo 28 de este mes, aunque con excepciones para varias provincias.

Por el momento, el Gobierno provincial ha decidido continuar esperando la publicación del DNU del Gobierno nacional, ya que, se indicó, “resulta indispensable conocer bajo qué condiciones se realiza la prórroga del ASPO, y qué tipo de decisiones se delegan a las autoridades de las provincias, antes de emitir una nueva norma provincial”.

Según se sabe, Suarez ya tiene decidido que se van a liberar más actividades en la provincia. Tras el DNU de Fernández, el gobernador seguramente liberará los deportes individuales, los gimnasios, la apertura de los shoppings y ensayos de teatro y música.

Los protocolos para liberar estas actividades fueron enviados a la Nación y se espera la respuesta a la espera de la etapa del distanciamiento social que el Gobierno nacional explicará en el DNU cómo será.

Por lo que se sabe hasta ahora, el distanciamiento social, preventivo y obligatorio se podrá aplicar en lugares con sistema de salud adecuado para la demanda sanitaria, que no tengan transmisión comunitaria del virus, y otros criterios epidemiológicos.

Además, las personas pueden circular, trabajar y realizar sus actividades siempre y cuando mantengan dos metros de distancia con otra persona.

Todas las actividades que reabren deben reorganizarse para garantizar esta norma y es obligatorio el uso del tapabocas, manteniendo también la conducta de la higiene de manos y respiratoria, ventilación de ambientes y desinfección de superficies.

Por otra parte, en lugares cerrados no se pueden reunir más de diez personas, cumpliendo el distanciamiento, y nunca superando la ocupación del 50% de la capacidad del lugar.

El que espera...

Completando ya 80 días desde que se decretó el aislamiento social preventivo y obligatorio, los mendocinos están ávidos por recobrar una normalidad, que, ya se percibe nunca será completamente normal.

Si las consecuencias psicológicas de la falta de contacto presencial con seres queridos, parientes y amigos, como también la falta de socialización por haber perdido los vínculos personales en las relaciones laborales son preocupantes, no lo son menos los resultados económicos de la prolongada situación.

Las pérdidas de empleos y la imposibilidad de soportar un parate tan prolongado ha provocado sentimientos de angustia y hasta desesperación en buena parte de la sociedad.

Por eso es que se espera con tanta ansiedad las decisiones políticas que puedan, si no revertir, al menos acercarse al estado de cosas previos a la cuarentena.

Durante la semana se movilizaron los dueños y empleados de gimnasios, quienes reclamaron al gobernador y al titular de Deportes, Federico Chiapetta, la reapertura de las actividades físicas. Entre los temas de la protesta figuraba la disconformidad porque se abrían cafés, bares y restaurantes y no actividades que favorecían la salud.

Para este lunes está prevista una reunión de los odontólogos con el ministro de Gobierno, Víctor Ibañez.

La fuerte incidencia de la acción de todos los sectores para evitar contagios masivos de coronavirus, hizo que en el sector de la salud se apuntaran todos los cañones a prevenir primero con infraestructura médica y después a la atención directa de los enfermos, hizo que se descuidaran otras especialidades. Si bien las urgencias no se desatendieron, sí se postergó la atención de muchos pacientes.

Además se dio el caso de que muchos no fueron a los hospitales simplemente por miedo al contagio.

Durante los días previos al anuncio de Suarez, y después de saber que el presidente Fernández estiraba la cuarentena hasta el 28 de junio, pero que dividía a la Argentina en dos sectores bien definidos, se pudo ver gran cantidad de gente en las calles.

Ante cierto relajamiento de los controles, no se pudo constatar si aún se respetaban las restricciones en cuanto a la salida según el último dígito del DNI.

Miles de personas dieron por sentado que la flexibilización prevista para las regiones donde no hay circulación social del virus.

A pesar que el mandatario mendocino aclaró que todo seguía igual hasta el 7 de junio, cuando se emitiría un decreto, todo el que pudo y lo decidió salió a hacer sus cosas.

Es de esperar que esta gran afluencia humana que se vio viernes y sábado no tenga consecuencias sanitarias, aunque muchos especialistas han señalado que en el movimiento de personas al aire libre y si no hay aglomeraciones, es poco factible que se trasmita el virus.

Siempre hay que tener en claro que ante cualquier rebrote de la enfermedad las autoridades, tanto nacionales como provinciales, han advertido que se dará un corte a todo tipo de apertura.

Mendoza se puede decir que tiene cierta ventaja por el bajo número de casos, pero es una zona del país que corre riesgos por la constante circulación de camiones desde y hacia Chile, además de los que ingresan con destino local.

La aparición de casos originados probablemente por el contagio de un transportista, hizo que se ajustaran los controles provocando situaciones enojosas que incluso llevaron a que los hombres del volante tomaran medidas de fuerza.