Presentaron el diagnóstico para comenzar la remediación en los cerros Arco y Gateado
Si bien aún no hay plazos para la recuperación del sector, se va a intervenir en forma activa en algunos aspectos para lograr que el ecosistema vuelva a su estado original
Por Redacción
Se presentó el informe de los daños ocasionados por el incendio de septiembre de 2018 en los cerros Arco y Gateado, fundamental para iniciar las tareas de remediación ambiental.
Se trata de un informe elaborado por un equipo interdisciplinario conformado por investigadores del Conicet Mendoza, la Universidad Nacional de Cuyo, el Instituto Nacional del Agua y el apoyo de alumnos avanzados de Ingeniería en Recursos Naturales, todos ellos coordinados por la Fundación CRICYT.
Un trabajo sin plazos
En un primer momento, con las evaluaciones post incendio, se había señalado que la flora podría recuperarse recién en 30 años y la fauna en 50.
El presidente de la Fundación, Mariano Coni, señaló: “Estamos presentando el primer informe de restauración del cerro Arco. Esto surgió a través de un convenio de la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial y la Fundación CRICYT. La Fundación está integrada por distintos investigadores del CONICET, la Universidad Nacional de Cuyo y el Instituto Nacional del agua. Convocamos a distintos especialistas en distintas temáticas que teníamos que abordar en la restauración ecológica. Lo que vamos a presentar ahora es el primer informe, que es un diagnóstico del estado de situación ecológica actual de los cerros Arco y Gateado”.
Según el científico, “a partir de aquí hay que diseñar las estrategias, en líneas generales hubo una disminución de la cobertura vegetal en general. Hay animales que han desaparecido, no están y están esperando que se recupere el hábitat. Están los primeros informes de los riesgos aluvionales y hay que ver cómo puede impactar la erosión”.
“Hablar de plazos de restauración en ecología es muy difícil. Hubo un principio de restauración pasiva y rebrotes de algunas especies. Pero hay otras que no han rebrotado y que van a requerir restauración distinta”.
Además, indicó que la liebre europea es uno de los animales exóticos, que "aparece por falta de competencia y falta de depredadores”, manifestó Coni.
Sobre la fauna autóctona explicó: “Posiblemente no volvamos en el corto plazo al ecosistema original. Se ha trabajado sobre mamíferos que están más al alcance de lo que estamos trabajando. Se ha hecho algo con aves pero fundamentalmente con mamíferos. Una de las cosas es que han salido los mamíferos nativos y han ingresado los exóticos. Eso puede ser una complicación”.
Finalmente, expresó que “a partir de este informe vamos a elaborar un mapa de requerimientos de restauración. Habrá zonas que van a necesitar restauración activa. Vamos a tener que hacer plantas en viveros y replantar, pero en la mayor parte se va a trabajar con restauración pasiva, que es estableciendo la condiciones naturales para tal fin”.
Sobre el uso público del cerro, resaltó: “Tengo entendido que las actividades recreativas del cerro van a continuar desarrollándose, pero hay planes futuros con los dueños de hacer un plan de manejo de ordenamiento territorial. El paso final sería lograr ordenamiento territorial en toda el área”.