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Fundación Cullunche pide por la Ley Provincial de Agrotóxicos

Luego de la muerte de tres cóndores en Malargüe, Jennifer Ibarra, miembro de esta organización, reconoció la necesidad de implementar una normativa para prohibir el uso de productos tóxicos que afectan al ambiente y en este caso, a la fauna

09 de mayo, 2019 - 18:17

La muerte de tres cóndores en el departamento Malargüe reabre el debate sobre el uso de productos tóxicos que afectan el medioambiente.

El miércoles por la tarde, un turista que circulaba por la Ruta Nacional 145, a la altura de Poti Malal, observó la presencia de los animales sin vida y dio aviso a personal policial y de Guardaparques.

Los cóndores hallados en la zona, dos hembras y un macho de acuerdo a lo informado, fueron sometidos a una revisión preliminar por parte de Fundación Cullunche para luego enviar las muestras a Buenos Aires (el resultado puede demorarse 10 días).

“No podemos confirmar que hayan sido envenenados pero los indicios nos llevarían a eso. No se encontró plomo en las radiografías”, explicó  Jennifer Ibarra, titular de dicha fundación.

La mujer también mostró su preocupación por la reiteración de este tipo de casos contras estas aves que pueden llegar a desplazarse unos 300 kilómetros por día.

“Es la tercera vez que pasa en los últimos años y siempre se registran las muertes en Malargüe. No sé realmente que hay que hacer para frenar con esta problemática”, reconoció Ibarra.

Además, la integrante de la fundación instó a los legisladores a darle sanción definitiva a la Ley Provincial de Trazabilidad de Agrotóxicos. En 2018, la Cámara de Diputado aprobó el proyecto de ley para regular el uso de agroquímicos en el territorio de Mendoza y ahora sólo resta que se apruebe en Senadores.

“A pesar de que estamos adheridos a una ley nacional y que tiene media sanción la ley local, siguen sucediendo casos de envenenamiento por el uso de agrotóxicos; habría que declarar la emergencia”, sentenció Jennifer.

Ibarra también explicó cómo es el proceso que utilizan los dueños de los puestos para colocar productos tóxicos. “Generalmente se utiliza un pedazo de carne o una cabra muerta para colocarle allí el veneno, el cual te puede matar en cuestión de minutos”, cerró.