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Mendoza presenta una alta tasa de intoxicaciones por botulismo

A raíz de los dos casos de botulismo en Buenos Aires, tras consumir hummus en conserva, el jefe de Toxicología de la provincia dio indicaciones para prevenir esta toxina

Por Redacción

20 de mayo, 2019 - 12:06

El botulismo es una de las consecuencias más graves de las intoxicaciones alimentarias y en ocasiones puede acabar siendo mortal, si no se trata a tiempo. Las complicaciones van desde debilidad prolongada al mal funcionamiento del sistema nervioso, parálisis o problemas respiratorios agudos.

Desde el jueves de la semana pasada, dos hermanas de 25 y 32 años se encuentran internadas en terapia intensiva en el Sanatorio Güemes del barrio porteño de Palermo, a raíz de un cuadro de botulismo, producido por haber consumido hummus vegano mal conservado.

A raíz de este caso trascendente, el jefe de Toxicología del Ministerio de Salud de Mendoza, Sergio Saracco, habló en radio Mitre sobre las conservas. “Se han perdido las buenas prácticas a la hora de elaborar conservas caseras. Saber que el botulismo es producido por una toxina, que es secretada por una bacteria que es el Clostridium botulinum. Está en la tierra, como la que produce el tétanos, pero en este caso tiene gran resistencia. Puede soportar distintos cambios climáticos, pero cuando encuentra el espacio propio para multiplicarse genera la toxina. Mendoza tiene la característica de tener alta carga de estas bacterias", remarcó el profesional.

Además, se refirió a algunos aspectos fundamentales a tener en cuenta a la hora de realizar una conserva en casa. "Lo principal es evitar la contaminación con tierra. Mantener muy buenas condiciones de higiene con los elementos que vamos a lavar. Los frascos deben ser perfectamente lavados, dejados boca abajo para evitar esta contaminación. También saber que hay ciertos alimentos que son de mayor riesgo que otros".

Agregó que "la conserva al estar cerrada se da la falta de oxígeno, la humedad está por encima del 90% y el hecho de estar fuera de la heladera es propicio. A nosotros nos queda por corregir el PH, los de PH ácido tienen pocas posibilidades de desarrollar la bacteria. Por eso los alimentos que son más alcalinos como la alcachofa, pimientos y algunos tomates que están muy en el límite. Por eso se recomienda echar una cucharadita de vinagre o ácido acético para acidificar, no agregar a estar conservas otros elementos como ajos".

Asimismo, el especialista explicó el mecanismo de acción que tiene la bacteria en el cuerpo de la persona: "Esta toxina cuando es ingerida tiene un período asintomático que va entre seis a doce horas. Se caracteriza porque genera una parálisis flácida y con forma descendente. Es decir que va desde la cabeza hacia los pies. Lo primero que se verá afectado es a nivel de los ojos, nos cuesta enfocar o ver carteles, eso es por parálisis del cristalino. Comenzamos a ver las luces dobles o vemos que un ojo se escapa. Se caen los párpados, si uno quiere mirar para arriba se cae el párpado. Después toma el velo del paladar con una boca gangosa, toma las cuerdas vocales con una voz bitonal. Después se pierde fuerza en los brazos y en los músculos respiratorios. No afecta el estado de conciencia, está totalmente lúcido".

Mendoza tiene alta tasa de este tipo de intoxicaciones. Para tratarlo contamos con un suero específico, pero cuanto más precoz es la consulta podemos neutralizar la toxina y evitar que llegue a los estadios más graves donde el paciente termine con asistencia respiratoria”, finalizó Saracco.