Sorpresivo respaldo de empresarios a los 190 días de clases

Tras la decisión del Gobierno provincial de iniciar el próximo ciclo lectivo el 18 de febrero, con el objetivo de alcanzar 190 días de clases, y el intenso debate social que trajo aparejado, empresarios, industriales y comerciantes salieron a respaldar públicamente la medida.

Lo hicieron a través de expresiones del titular de la Unión Industrial de Mendoza (UIM), Mauricio Badaloni, en el discurso inaugural del Tercer Foro Industrial que organizó la entidad y con la presencia de todo el arco productivo y sus cámaras.

Las palabras del empresario sonaron fuertes y sin confusión alguna, a punto tal que recibió un sonoro aplauso de la concurrencia en la que no solo estaba todo el ámbito privado mendocino, sino también miembros de la Unión Industrial Argentina (UIA) y empresarios de Cuyo y Córdoba. 

También se destacó la presencia del titular de la Dirección General de Escuelas (DGE), Jaime Correas, el vicerrector de la Universidad Nacional de Cuyo, Jorge Barón, y el ministro de Educación de la provincia de Córdoba, Walter Mario Grahovac. 

Frente a ellos, Badaloni no solo ponderó los 190 días de clases, ya que también lo hizo con el polémico Ítem Aula. En ambos casos, el empresario dijo que ponen las cosas “a favor de la calidad educativa y equilibran la balanza de responsabilidades mirando el crecimiento de Mendoza. Terminan con los excesos y ponderan le eficiencia laboral, en este caso de quienes educan”.

Tras los dichos del empresario, El Ciudadano mantuvo un diálogo exclusivo con el titular de la DGE, a quien le consultó sobre la impresión que le dio el respaldo empresario al aumento de días de clase, cuando gran parte de la comunidad, como también los educadores de diferentes niveles lo resisten:

“Me parece una definición muy importante y que cambia el eje para que cada uno de los protagonistas de este sistema que tenemos se pueda expresar, donde la sociedad habla sobre los temas de la educación. Por eso, que haya desde la industria un aval tan fuerte para estos hechos tan importantes de nuestra gestión de gobierno es muy bueno. Créame que es lo que espero, que la sociedad se exprese. Los que no están de acuerdo para que se les dé las explicaciones del caso y esperar que pase el tiempo, como ocurrió con el Ítem Aula, que hoy ya no tiene discusión tras el pronunciamiento de la Suprema Corte de Justicia. Y ahora con lo dispuesto sobre los 190 días de clase, donde la gente que está a favor irá sopesando a aquellos que tienen algún interés creado y se expresan en contra”.

—¿Qué pasa con la calidad de la educación? ¿O solo interesa que los números cierren?

—Esa es una chicana del SUTE. Más que todo es una falacia como las cosas absurdas que dice ese gremio. Esto de tener 190 días de clase no tiene nada que ver con esto de cuadrar números. Es tratar de lograr con los potentes docentes que tenemos que los chicos de nuestras escuelas tengan más días de clase. Eso será otro factor de mejoramiento y de calidad. 

“Pero sucede que es el SUTE el que no cree en la calidad de los docentes, en cambio este Gobierno cree y defiende la calidad de los docentes. Si el gremio creyera en ella, no haría este planteamiento. Por eso sostenemos que si los alumnos están más tiempo con los docentes el resultado será muy bueno. Si por ahí aparece un docente que no da en el nivel que resalto, lo ayudaremos a que se capacite para alcanzar este nivel”, aseguró Correas.

—¿Las escuelas están en condiciones y tienen elementos para contrarrestar el calor que deberán soportar alumnos y docentes?

–En estos momentos ya está haciendo el mismo calor que hará en febrero y se están dando clases. Y venimos de un mes fuerte en temperaturas, e inclusive hemos tenido más de un marzo con altas temperaturas. Me parece que es estar buscando el pelo al huevo y con esto le traigo nuevamente al SUTE, porque en el último año del gobernador Francisco Pérez se invirtió $26 millones en infraestructura y el SUTE tenía una misión en conjunto con el Gobierno para decidir qué escuelas se arreglaban, es decir, ninguna.

“En nuestro primer año de gobierno, ese presupuesto fue elevado a $250 millones, el segundo a $570 millones y ahora a $850 millones para infraestructura. Aún así, nosotros consideramos que no es suficiente todo ese dinero, porque a los arreglos hay que emparejarlos con un programa sostenido como el que venimos teniendo para ir arreglando todas las escuelas. Una infraestructura que estamos arreglando sin pausa y que los docentes, los padres y la comunidad ven”, agregó el funcionario.

—Ya que habla de comunidad, ¿escuchan a los trabajadores que dicen que los de febrero son los pocos días en el año que le otorgan vacaciones?

—Habrá alguna persona que tenga problemas con sus vacaciones. Creo personalmente que si uno de los problemas centrales del trabajo, de la cultura, de que no pasen cosas como el River-Boca, es la educación, hay que atenderla. Esto  lo venimos diciendo y lo sostenemos. Entonces, tenemos que priorizar: o son las vacaciones de los pocos que se pueden ir de vacaciones, porque el resto no tiene dinero para hacerlo, o es la educación”.

“Nosotros estamos planteando una mayor cantidad de días de clase para que los sectores más vulnerables tengan mayor calidad de educación. Y aprovecho para aclarar otra falacia que circula por estas horas: no es que vaya por un lado la cantidad y por otro la calidad. Mayor cantidad de algo de calidad, es mayor calidad. Eso es inevitable, si creemos en nuestra escuela, y creemos que estamos en un proceso de mejoramiento por el hecho de que si hay mayor cantidad de días de clases aumenta la calidad de la educación. Como lo hacen todos los países latinoamericanos, y Mendoza sería la primera provincia argentina en hacerlo”.