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IGLESIA | Renunció un cardenal acusado de encubrimiento de abusos sexuales

El Papa Francisco aceptó el pedido de abandono de cargo por parte Donald Wuerl, quien fue señalado por silenciar los ataques a menores cuando fue obispo de Pittsburgh

Por Redacción

12 de octubre, 2018 - 12:20

El acusado de callar y ocultar casos de abusos a menores había presentado su dimisión en septiembre pasado, pero el máximo pontífice no la había aceptado.

En una carta a los sacerdotes de la archidiócesis de Washington, el cardenal de 77 años explicó su decisión de volver a presentar su renuncia ante el Papa, acción que ya había realizado por primera vez hace tres años, por cuestiones de edad.

Todo empezó cuando salieron a la luz más de 1.000 casos de abusos sobre menores por parte de 300 sacerdotes, en un informe de Pensilvania, en el cual apareció el nombre de Wuerl en múltiples ocasiones por su mala gestión y encubrimiento cuando era obispo de Pittsburgh. Sin embargo, él siempre se defendió de estas acusaciones al asegurar que en cuanto supo de las denuncias se involucró de lleno.

Hoy se publicó en la página web del arzobispado de Washington la carta en la que Francisco acepta su renuncia. En ella agradeció su petición y nobleza afirmando que hay que dejar claro la intención de poner el proyecto de Dios por delante, incluso de cualquier proyecto personal. También comenta: "Usted tiene elementos suficientes para justificar sus acciones y distinguir entre lo que significa encubrir crímenes o no ocuparse de problemas o cometer algunos errores".

Además le pidió que permanezca como administrador de la archidiócesis hasta el nombramiento de su sucesor.

En referencia a la carta, Donald Wuerl se mostró agradecido y muy conmovido por las palabras de comprensión del Papa y expresó: "La decisión del Santo Padre de proporcionar un nuevo liderazgo a la Archidiócesis puede permitir que todos los fieles, clérigos, religiosos y laicos, se centren en la sanación y el futuro. Permite a esta Iglesia local avanzar. Una vez más, por cualquier error de juicio pasado, me disculpo y pido perdón. Mi renuncia es una forma de expresar mi gran y perdurable amor por ustedes, la gente de la Iglesia de Washington".