Escándalo extra futbolístico relacionado con un jugador de Godoy Cruz

El mediocampista de Godoy Cruz Marcelo Freites, uno de los tres futbolistas que dieron positivo por coronavirus, fue denunciado por el intendente de la ciudad sanluiseña de Unión por presumiblemente ingresar en forma ilegal a San Luis el pasado 24 de julio.

A raíz de las confusas informaciones al respecto, la Municipalidad de Unión activó el protocolo de trazabilidad para determinar dónde y con quién estuvo el contagiado. Al mismo tiempo pidió "no difundir noticias falsas".

Según el intendente de esa localidad, Marcos Espósito,  a través de una investigación policial y el testimonio de la familia de Freites, "se pudo confirmar que el jugador ingresó de forma ilegal a la localidad, entre los días 24 y 28 de julio, y que el día 31 estando en Mendoza el estudio de Covid le dio positivo".

El ingreso de Freites a Unión todavía es una incógnita: "Se sospecha que ingresó caminando por el Río Salado e infringió dos controles, el del límite de la provincia y el ingreso a la localidad", dijo Espósito.

La familia del jugador lo defendió de las acusaciones negando que estuviera allí cuando la policía se acercó a la casa a investigar el supuesto ingreso ilegal. 

Además desmintieron la versión de que el club esté analizando rescindir el contrato del jugador.

Su representante Guillermo Fechenbach Repre también dio otra versión de los hechos: “Nunca cruzó a San Luis. Estuvo tres días en Alvear, el lunes fue hisopado y dio positivo”
Su versión contrasta con la del intendente de Unión. "No se movió mucho de su casa porque sabía que la policía estaba en conocimiento de que él estaba acá y de la forma en la que estaba".

Freites habría estado en su hogar de San Luis 24 al 29 de julio, fecha en la que regresó a Mendoza del mismo modo en el que ingresó a la provincia. Aunque recién el lunes pasado, 3 de agosto, se conoció que dio positivo. Tras ello, tras detectar el caso, el sistema público de salud sanluiseño desplegó el operativo epidemiológico en esa localidad bajo el objetivo de aislar a los contactos estrechos que convivieron con el chico y a las personas con las que mantuvo reuniones.

“El caso es investigado por la Justicia. El juez Santiago Ortiz, juez Contravencional y Correccional de la segunda circunscripción judicial, ordenó el inicio de causa por incumplimiento al artículo 205 y 239 del Código Penal en contra de este joven y su madre”, declaró el coordinador del Ministerio de Justicia, Seguridad, Gobierno y Culto, Luciano Anastasi.

“La directora del Hospital de Unión, Sandra Guzmán, se comunicó con el Ministerio de Salud y de inmediato se aisló a su grupo familiar y a los contactos estrechos del joven en cuestión. El 3 agosto tuvo un diagnóstico positivo para COVID-19. Pudo haber estado en período de incubación. No sabemos desde cuándo es positivo porque es asintomático”, comentó la titular del Comité de Crisis, María José Zanglá.

“Un equipo de Epidemiología viajó a la localidad y junto con personal del hospital de Unión hicieron la trazabilidad de todos. Hay 27 personas aisladas, 10 fueron convivientes con el paciente y se decidió hisoparlos”, añadió.