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La vacuna de Oxford produjo inmunidad en pacientes de la tercera edad

El fármaco británico generó una robusta respuesta en el sistema inmunológico de adultos mayores en las pruebas realizadas. Hay expectativa en el mundo por la vacuna que desarrollan AstraZeneca y la Universidad de Oxford

Por Redacción

26 de octubre, 2020 - 14:25

 

Uno de los grupos de riesgo del COVID-19, son los adultos mayores. Hay noticias alentadoras que llegan para todos ellos desde AstraZeneca y la Universidad de Oxford, ya que la vacuna que están diseñando contra el coronavirus avanza en sus estudios y etapas. Se conoció este lunes que el medicamento probado en varias personas acusó que este produce una respuesta inmune al virus tanto en adultos jóvenes como en los mayores y además, las respuestas adversas fueron menores entre los ancianos.

La noticia se conoció este lunes a través de un comunicado que emitió AstraZeneca.

Hay que destacar los ensayos de la denominada ‘vacuna de Oxford’ se encuentran en fase 3, la última y necesaria etapa según los estándares internacionales para conocer si es segura y otorga inmunidad a la población pasible de tal enfermedad. Paso necesario además, antes de ser producida de forma masiva ya que necesitará el visto bueno de los reguladores.

Según medio Financial Times, la respuesta inmune observada en personas mayores funcionaría para evitar complicaciones por la enfermedad y prevenir la infección.

La vacuna produce anticuerpos protectores y células T en grupos de edad avanzada, aclararon desde el medio internacional, en torno a resultados parciales que se tienen del fármaco británico y que dos personas familiarizadas con el proceso explicaron a la citada web.

Matt Hancock, secretario de Salud británico aclaró en diálogo con los medios que la vacuna estará disponible para el año próximo pero que siguen paso a paso las etapas para que “todo vaya perfectamente”.

“La vacuna generó respuestas inmunes robustas en adultos sanos de 18 a 55 años, generando anticuerpos y las llamadas células T, cuyo principal propósito es identificar y matar patógenos invasores o células infectadas”, explicaron.

Los especialistas apuntan que la inmunidad de las células T es clave para para la protección contra la infección por el virus y podría proporcionar una inmunidad a más largo plazo que los anticuerpos.

"Si tienen datos que muestran que la vacuna genera una buena inmunidad, medida en el laboratorio, en el grupo de más de 55 años, y que incluye una buena respuesta en gente que es mucho mayor, creo que es una señal prometedora", señaló al Financial Times, Jonathan Ball, profesor de virología de la Universidad inglesa de Nottingham.

"La reactogenicidad —la propiedad de una vacuna de ser capaz de producir reacciones adversas comunes— fue menor en los adultos mayores, donde la gravedad de la enfermedad COVID-19 es mayor”, dijo a Reuters un portavoz de AstraZeneca. “Los resultados reúnen un conjunto de pruebas que demuestran la seguridad e inmunogenicidad del AZD1222”, explicó el especialista.

Desde AstraZeneca trabajan en conjunto con científicos de la Universidad de Oxford en este proyecto de vacuna. Las investigaciones que encararon fueron pioneras a nivel mundial en la búsqueda para hallar un fármaco que permita combatir la pandemia de COVID-19.

 

La tercera edad, un grupo de riesgo

Uno de los factores determinantes a la hora de hablar de riesgo si se contrae COVID-19 es la edad de esa persona, ya que esta está ligada estrechamente a la capacidad que tiene el organismo de producir anticuerpos.

El sistema inmunológico se debilita con el paso de los años de vida de una persona por lo que las personas que pueden ser consideradas dentro de la denominada 'tercera edad', son especialmente débiles ante el virus.

 

La vacuna que espera América Latina y la UE

En el pasado mes de agosto, la Unión Europea (UE) cerró con AstraZeneca un primer contrato por 300 millones de dosis que serán distribuidas en función de la población que tiene cada país miembro.

 

En el mismo mes que AstraZeneca firmó un convenio de distribución de su vacuna con la UE, también lo hizo con Argentina y México.

La vacuna será producida en ambos países y luego distribuida en América Latina con excepción de Brasil.

Una voluntaria durante el ensayo de la vacuna de AstraZeneca en Brasil (EFE/Sebastiao Moreira/Archivo)

Las pruebas clínicas de las diferentes etapas se han desarrollado en países como Estados Unidos, Brasil, Sudáfrica y el propio Reino Unido.

 

Problemas con la vacuna de Oxford

Los ensayos del proyecto de AstraZeneca y Oxford, han tenido algunos inconvenientes que "empañaron la fama” de tal investigación que cursan.

En julio se publicaron los primeros resultados alentadores del proyecto de vacuna sin embargo, con el paso del tiempo y más pruebas e investigaciones, se tuvieron que interrumpir los ensayos en agosto y recién se reanudaron en septiembre, debido a una reacción adversa que sufrió un voluntario de la vacuna.

Por otro lado, en Brasil recientemente falleció un voluntario de las investigaciones. No trascendieron mayores detalles del caso pero medios locales afirman que la persona habría recibido un placebo y no la vacuna, por lo que el incidente entonces no estaría ligado al fármaco que desarrolla AstraZeneca.